Lightfoot le pide a Abbott que deje de mandar autobuses con inmigrantes
La alcaldesa de Chicago tildó la medida de "inhumana y peligrosa" y explicó que la ciudad se quedó sin "refugios, espacios ni recursos".
La alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, dijo estar "feliz" cuando se enteró de que el gobernador de Texas, Greg Abbott, le iba a enviar autobuses con inmigrantes en situación irregular. Fue en septiembre del año pasado, cuando la demócrata sostuvo que estaba dispuesta a alquilar ella misma los vehículos para el próximo viaje.
Su ánimo parece haber cambiado. Este lunes dio a conocer una carta en que le pide al gobernador que frene. "La ciudad de Chicago es consciente de que Texas tiene previsto reanudar el transporte en autobús de personas a ciudades de todo Estados Unidos, incluida Chicago, a partir del lunes", empieza la carta en la que la alcaldesa pide a Abbott que no siga con una medida "inhumana y peligrosa".
Lightfoot escribió que recibieron a 8.000 personas desde que comenzaron los envíos el año pasado. La alcaldesa sostiene la ciudad da la bienvenida a los inmigrantes, pero que:
La situación, para la alcaldesa, se volvió totalmente "insostenible". Además señaló que era un problema nacional, que no se solucionaría delegando la responsabilidad a las urbes.
'Asegurar' la frontera
El envío de autobuses forma parte de la estrategia de Abbott para "aliviar y asegurar" la frontera. El destino de los viajes son las "ciudades santuario", cuyas normas son más 'amigables' para los inmigrantes que las nacionales. Algunos de estos ómnibus incluso aparcaron frente a la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris.