La guerra en Israel continúa y los ciudadanos son los primeros que han visto cómo cambia su vida en tan solo 24 horas. Una de las localidades más afectadas fue Sderot, cercana a la Franja de Gaza. Allí su alcalde, Alon Davidi, informa puntualmente de cómo está la situación mediante su cuenta de Facebook. En una de sus últimas actualizaciones, el edil aseguró que aún podían encontrarse terroristas en Sderot mientras que alertaba a los residentes que se mantuviesen en sus hogares con las puertas y ventanas cerradas.

Mientras tanto, las imágenes continuaron circulando por las redes sociales y uno de los videos que más se viralizó fue precisamente el de varios militares patrullando las calles mientras buscaban a los terroristas que quedaban sueltos por las calles.

La intervención militar era una respuesta directa a la petición que hacían, horas antes, algunos habitantes de Sderot. Uno de ellos logró hablar con el diario El Mundo y compartió su frustración con el medio, que contactó con él a través de una llamada telefónica: "¡Hay numerosos terroristas aquí! Nunca he visto algo parecido. ¿Dónde están nuestros soldados?".

Mientras tanto, aseguró un reportero de Canal 12 en declaraciones recogidas por Times of Israel, las calles muestran una imagen desoladora con muchos "cuerpos en el suelo... imágenes terriblemente graves, escenas difíciles de describir". Estos cadáveres, aseguró el reportero, son "víctimas de los disparos provocados por los terroristas de Hamás que se infiltraron en la ciudad desde Gaza".

Ciudadanos de Israel secuestrados en Gaza

El panorama no parece mejorar. Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) aseguraron que tenían conocimiento de que varias personas habían sido tomadas como rehenes por los terroristas de Hamás y habían sido trasladadas a Gaza.

Además, informó el principal portavoz de las Fuerzas de Defensa, el contralmirante Daniel Hagari, varios soldados israelíes habían muerto en combate. Mientras tanto, aseguró, la contraofensiva continúa y hay 22 lugares de combate en curso en el sur de Israel, incluidos conflictos con rehenes en Be'eri y Ofakim.

A pesar de que la situación es especialmente grave en el sur del país, el centro también está bajo alerta. Cora, una mujer argentina que vive con su marido israelí en Ramat Gan, cerca de Tel Aviv, explicó a Voz Media que a primera hora del sábado en su localidad sonaron hasta cuatro sirenas alertando del peligro. Sin embargo, parecía que lo peor allí ya había pasado: "Ahora acá está callado todo, pero en el sur... un horror".