Tras tres semanas intentando elegir a un nuevo presidente de la Cámara, los republicanos han logrado ponerse de acuerdo y elegir al conservador Mike Johnson, quien alcanzó todos los votos del partido.
Johnson es congresista por Louisiana y ha sido miembro de la Cámara de Representantes desde 2016, este es su cuarto período. Es provida, es un hombre que defiende la fe, y es muy fuerte promoviendo los valores conservadores.
La clave de Johnson es que es un congresista respetado por los diferentes grupos del Partido Republicano. Tanto moderados, como los más conservadores, celebraron el martes en la noche cuando en una reunión a puerta cerrada el partido lo eligió como su nominado a la Presidencia.
Johnson es considerado un hombre trabajador, conciliador y el tipo de congresista que no busca las cámaras para llamar la atención sino que gana su reputación gracias a su arduo trabajo. Tiene buenas relaciones personales con todos los miembros de la Cámara, cuestión que resalta en tiempos en los que el Partido Republicano ha mostrado fuertes divisiones.
El Congresista por Louisiana ha sido alabado por el ala más conservadora, logrando el apoyo de congresistas como Matt Gaetz —quien lideró la expulsión de Kevin McCarthy de la Presidencia de la Cámara—, pero también ha logrado el apoyo claro de miembros del establishment del partido, como el líder de la mayoría Steve Scalise, quien dijo que Johnson "tiene un historial comprobado como líder conservador que luchará por el pueblo estadounidense contra la agenda radical del presidente Biden que está aplastando a las familias trabajadoras".
Posiblemente Johnson será un speaker más fuerte comprado a McCarthy. Se espera, por su experiencia y el trabajo que ha hecho en sus años en la Cámara, que trabaje fuertemente en asuntos como impulsar la reducción del gasto y asegurar la frontera.
