¿Cuál es la estrategia de Nikki Haley detrás de su decisión de no participar en los caucus republicanos de Nevada?

En su afán por llegar con oportunidades a Carolina del Sur, la exgobernadora podría llevarse un golpe inesperado en las primarias del 6 de febrero.

Si usted no está siguiendo el intenso ritmo de las primarias republicanas posiblemente dejó pasar por alto un detalle cuanto menos curioso: la próxima semana serán las elecciones primarias en Nevada y los dos principales candidatos republicanos, Donald Trump y Nikki Haley, no compartirán boleta electoral y tampoco competirán el mismo día. Una situación realmente atípica que todavía tiene muchas preguntas sin resolver.

Primero, hay que entender el contexto electoral del estado. En Nevada, debido a nueva ley estatal firmada por el entonces gobernador demócrata Steve Sisolak en 2021, se debe realizar obligatoriamente un día de votaciones al estilo primarias, sin embargo, recae en los partidos la autoridad de cómo repartir los delegados estatales gracias a un fallo de un juez local en 2023.

Por ello, el Partido Republicano de Nevada decidió que los delegados se repartirán en los caucus de Nevada, que se realizarán el 8 de febrero y es la forma tradicional de elegir al candidato del GOP desde 1980.

Sin embargo, la exembajadora ante la ONU Nikki Haley, en un extraño movimiento político, decidió inscribirse únicamente en las elecciones del 6 de febrero, que para el GOP de Nevada no representan nada más allá del “derecho breve a fanfarronear” políticamente.

En definitiva, durante las asambleas electorales dirigidas por el partido, es decir los caucus del 8 de febrero, donde Trump sólo se enfrentará al empresario y pastor de Texas Ryan Binkley, se disputarán los 26 delegados a la Convención Nacional Republicana.

¿Por qué Nikki Haley decidió no correr en los caucus?

Esa es la pregunta del millón. Haley todavía no dio explicaciones sobre su estrategia y muchos analistas políticos no quieren hablar al respecto porque simplemente no entienden la jugada o la explicación detrás de la decisión.

No obstante, algunos se animan a dar su visión sobre el asunto, como el analista político Eric Fajardo Pozo, máster en Comunicación Política en la Universidad George Washington.

Fajardo, en una conversación con Voz Media, afirmó que las primarias republicanas, a pesar de que quisieron imponerse “contra viento y marea”, serán “testimoniales”; y explicó que Haley optó por ellas para mantenerse viva en la contienda electoral y no encajar una tercera derrota consecutiva antes de las primarias de Carolina del Sur, su estado natal, que se realizarán el próximo 24 de febrero.

“Yo pienso que en realidad ella sabía que no había nada que hacer en Nevada”, dijo Fajardo a Voz Media. “Es un estado donde ella no hizo campaña, no tiene ningún tipo de base política operativa y sabía que iba a perder. Entonces, la decisión es estratégica: ¿Cómo perder?, ¿dónde perder? El ir a la primaria siempre permite cambiar el debate hacia qué es lo legítimo”.

Las encuestas muestran que las primarias en New Hampshire es una batalla entre dos candidatos: Trump y Haley
Fotografía de 2018 entre Donald Trump y Nikki Haley. (Cordon Press)

Voz Media se puso en contacto con la campaña de Nikki Haley para obtener su versión sobre la decisión de no acudir a los caucus de Nevada, pero no hubo respuesta.

Según Fajardo, para Haley es contraproducente “subirse a la báscula con Donald Trump en un lugar donde va a cosechar su tercera derrota”.

“Ella se saltó Nevada porque piensa que tiene una mejor oportunidad de cosechar un 2-1 en Carolina del Sur. No quiere llegar con un 3-0 a su estado natal. Sabía que el efecto de Nevada iba a ser completamente adverso en la psicología de los electores”, continuó Fajardo, que además calificó la situación de la exgobernadora como “muy complicada” debido a que todavía no se sabe si la candidata podrá participar o no en las elecciones de Indiana.

¿Puede Haley participar en los caucus?, ¿realmente no tiene rivales en las primarias?

Si Haley quisiera participar, de forma repentina, en los caucus de Nevada organizados por el Partido Republicana, la realidad es que ya no podría. El GOP de Nevada dejó en claro que el candidato que apoye las primarias estatales estaría oficialmente vetado de los caucus.

Por ello, a priori, los resultados son previsibles: el 8 de febrero, Trump ganará los caucus republicanos y se llevará consigo los 26 delegados y Nikki Haley, al ser la única candidata importante en las primarias, ganará el 6 de febrero el derecho a imponer una narrativa ganadora para ganar impulso de cara a las elecciones de Carolina del Sur… ¿o no?

A pesar de que no hay un candidato serio que le pueda hacer frente a Haley el 6 de febrero, hay una opción inesperada que podría ser un dolor de cabeza para la exembajadora ante la ONU: “Ninguno de los anteriores”.

El gobernador republicano de Nevada Joe Lombardo dijo en una entrevista que respaldará a Trump en los caucus del 8 de febrero y que votará por la opción “Ninguno de los anteriores” en las primarias republicanas animando a los electores a seguir sus pasos.

El vicegobernador Stavros Anthony, también republicano, anunció en un comunicado que respaldará a Trump en los caucus y que votaría “Ninguno de los anteriores” en las primarias estatales.

El exfiscal general Adam Paul Laxalt, dijo este viernes en X (Twitter) que emitió su voto en las primarias estatales y eligió la opción “Ninguno de los anteriores”.

Entonces, a falta de Trump en la boleta, ¿es posible que Nikki Haley pueda perder contra la opción “Ninguno de los anteriores” en Nevada antes de la parada en Carolina del Sur?

Todavía es muy pronto para saberlo, pero, según una encuesta de Providence relevada por el Washington Examiner, en un esfuerzo de colaboración entre Revere Solutions y DecipherAi, Haley podría perder las primarias en Nevada.

Según el reporte, la encuesta “mostró que el 59,2 % de los votantes primarios republicanos de Nevada dijeron que elegirían a ‘ninguno de estos candidatos’ durante las elecciones primarias republicanas del 6 de febrero, en comparación con el 40,8 % que elegiría a Haley”.

Woodrow Johnston, director ejecutivo de Revere Solutions, que no está afiliado a ninguna campaña presidencial, le dijo al Washington Examiner que una derrota de Haley en estas primarias podría representar un golpe de nocaut para su carrera presidencial.