El FBI arrestó a un hombre en Houston, Texas, por una violación en grupo filmada a niños pequeños en un centro comercial. Arthur Héctor Fernández trabajaba en un quiosco en el mall Galleria y las autoridades lo detuvieron a mediados de diciembre.
Las autoridades acusaron al hombre, de 29 años, de explotación sexual de menores. En concreto, le denunciaron por agredir a los niños pequeños y luego subir los vídeos, en los que se ve a al menos seis hombres más. Estas personas, que aún no han sido identificadas, también pasaron a disposición policial.
Según explicó la policía en declaraciones recogidas por el Daily Mail, dos amigos de Fernández lo dejaban al cargo de dos niños de 2 años mientras ellos trabajaban en el centro comercial. Él y las otras seis personas agredían sexualmente a los menores y lo filmaban. Esas grabaciones las descubrió el Centro Australiano para Contrarrestar la Explotación Infantil (ACCCE) en un foro privado al que sólo se podía acceder por invitación de la dark web.
Las pruebas contra el hombre de Texas, "abrumadoras" y "repugnantes"
Esas pruebas fueron más que suficientes para que el juez magistrado del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, Andrew Edison, emitiese una orden de detención por la que Fernández permanecerá detenido hasta el juicio ya que, aseguró en declaraciones recogidas por The Houston Chronicle, las pruebas en su contra son "abrumadoras" y "repugnantes":
No puedo permitir que el acusado abuse de ningún otro menor y no hay condiciones o combinación de condiciones (de puesta en libertad) que puedan paliar un peligro para la comunidad. No se trata de una decisión por los pelos.
Lo que más llamó la atención en este caso es que el depredador era un amigo de los padres. Sin embargo, el agente del FBI Torrence White, aseguró a ABC13 que esto no es tan extraño como puede parecer:
Los perpetradores de estos crímenes son familiares, maestros y miembros de la comunidad. A menudo la gente busca al monstruo de la furgoneta blanca, pero normalmente es la persona que conoces.
