Un grupo de activistas de Florida envía en secreto cientos de paquetes con artículos de cambio de sexo y armas para niños transgénero de todo el país.
La organización Queer Trans Project (QTP) ha estado enviando de forma gratuita unos kits con productos como: preservativos, cintas adhesivas especiales para ocultar los genitales masculinos, sujetadores femeninos, entre otros. Hasta hace poco los paquetes de obsequio también incluían armas como: cuchillos, pistolas de electrochoque, gas pimienta y hasta un instructivo de cómo usar las armas.
De acuerdo a la directora del grupo, Cielo Sunsarae, las armas fueron proporcionadas por otro grupo de activismo llamado Thorn, cuya sede está en Chicago. La organización considera que estos artículos son de “defensa personal” e incluso está considerando volver a entregar estos productos junto con otros programas con los que regalaban hormonas y hasta financiamientos para cirugías transgénero.
“Después de una cuidadosa consideración y con sentimientos agridulces, descontinuamos los programas antes mencionados. Si bien estamos pausando algunos de nuestros programas en este momento, no significa necesariamente que se hayan ido para siempre”, indica QTP en su página web.
De acuerdo a la página web del grupo, los kits están disponibles para destinatarios de todas las edades incluyendo niños, y ya se han entregado más de 900 en todo el país.
Trans Activist organization shipping condoms, chest binders, lingerie and other items to underage children across 45 states.
Florida based The Queer Trans Project has sent over 900 packages to children behind their parents backs.
They use TikTok to target these children. pic.twitter.com/KvtEQ0dmMh
— Oli London (@OliLondonTV) May 10, 2023
¿Es legal?
The Epoch Times contactó a varios expertos para hablar sobre esto y ellos dijeron que el grupo podría estar incurriendo en delitos, al menos según las leyes de algunos estados.
Jeff Childers, abogado y médico dijo que QTP parece estar violando las leyes de Florida debido a que en ese estado es “ilegal vender o distribuir cualquier material o producto que sea dañino para menores, incluidos dispositivos sexuales, pornografía u otros productos para adultos, a cualquier persona menor de 18 años”.
Sin embargo, la directora de la organización parece no estar preocupada. “Cualquier cosa que puedan hacer a nivel gubernamental, vamos a contraatacar a nivel de organización. Ellos pueden hacer lo que quieran. Pero como organización sin fines de lucro (…) no pueden venir por nosotros”, le dijo a The Epoch Times.
