LA AMENAZA CHINA

La legislación china obliga a todas las empresas chinas a facilitar información al Partido Comunista chino cuando éste lo solicite.

Estados Unidos acaba de prohibir TikTok en todos los dispositivos del Gobierno federal por crecientes problemas de seguridad. Es un buen comienzo.

Según advirtió a principios de diciembre el director del FBI, Christopher Wray, TikTok está controlada por el Gobierno chino, lo que supone un problema de seguridad nacional.

TikTok, una aplicación para compartir vídeos propiedad de la empresa china ByteDance, tiene, según sus propias estimaciones, 1.000 millones de usuarios en todo el mundo. En 2021 tenía aproximadamente 87 millones de usuarios en Estados Unidos, según Statista. Preocupantemente, un estudio reciente reveló que el 10% de los adultos estadounidenses se informan a través de esta app china, frente a un 3% en 2020.

Wray afirma que el Gobierno chino puede controlar el algoritmo de recomendación de la app, "lo que le permite manipular contenidos y, si quiere, utilizarlos para operaciones de influencia". "Todo esto está en manos de un Gobierno que no comparte nuestros valores y que tiene unos objetivos muy enfrentados con lo que es mejor para los intereses de Estados Unidos. Eso debería preocuparnos", afirmó el alto funcionario en un discurso pronunciado en la Universidad de Michigan.

Allí, Wray incidió en lo que dijo en su comparecencia ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes el 15 de noviembre, relativa a las amenazas globales a la seguridad nacional. "Al menos en el FBI, tenemos preocupaciones de seguridad nacional sobre TikTok", declaró.

Entre ellas, la posibilidad de que el Gobierno chino la utilice para controlar la recopilación de datos de millones de usuarios. O el algoritmo de recomendación, que podría utilizarse para operaciones de influencia (...) O el software de millones de dispositivos, lo que le daría la oportunidad de comprometerlos técnicamente (...)

Las preocupaciones de Wray no son nuevas; de hecho, llegan un poco tarde. En 2020, el presidente Donald J. Trump, esgrimiendo motivos similares, intentó proscribir la app en EEUU, además de sancionar a la empresa, pero varios jueces federales fallaron en contra tanto de las sanciones como de la prohibición, bloqueando así sus inteciones. Un juez dictaminó que la prohibición era "arbitraria y caprichosa" y "no consider[aba] adecuadamente una alternativa clara y razonable".

"El sometimiento de ByteDance a la legislación china la ha convertido en un oído y altavoz fiable, útil y de gran alcance para el Partido y el Estado", reportó entonces la Administración Trump en un documento que motivaba la propuesta de prohibición y que citaba el compromiso de ByteDance con el Partido Comunista Chino (PCC) como causa de la "censura sistémica de contenidos en todas sus plataformas" y de la "recolección de datos de los usuarios".

En dicho texto, la Administración Trump destacaba:

ByteDance (...) y sus filiales están sujetas a las leyes de seguridad nacional de la RPC [República Popular China], que exigen u obligan a prestar asistencia a cualquier ciudadano o entidad china en operaciones de vigilancia e inteligencia. Dado que ByteDance está sujeta a la jurisdicción de la RPC, las leyes de este país pueden obligarla a cooperar...

La legislación china obliga a todas las empresas chinas a facilitar información al Partido Comunista chino cuando éste lo solicite, y ByteDance emplea a más de 130 miembros del Partido en garantizar que se cumple de la ley, entre otras cosas.

Volvamos a la Administración Trump:

Uno de los principales riesgos para la seguridad nacional que presenta la aplicación móvil TikTok (...) es la posibilidad de que el Gobierno de la RPC pueda, mediante su autoridad legal, influencia extralegal [el Partido Comunista] o el PRCISS [servicio de inteligencia chino], obligar a TikTok a proporcionar acceso sistémico a información sensible de los usuarios estadounidenses. Varios informes de prensa indican claramente que el Gobierno de la República Popular China ya ha obligado a TikTok a prestarle ayuda en acciones de vigilancia, censura y propaganda en China, y su cumplimiento indica que es probable que responda a las solicitudes de inteligencia sobre usuarios estadounidenses. Dada la gran cantidad de información que TikTok podría ofrecer sobre sus usuarios extranjeros, así como las tácticas cibernéticas antes mencionadas empleadas por la RPC, el Departamento de Comercio evalúa que la RPC y el PRCISS no limitarían su utilización de TikTok a asuntos internos y, en cambio, se servirían de ella para labores de inteligencia y vigilancia extranjeras.

Además, de forma similar a lo expresado por Wray, la Administración Trump argumentó:

El Gobierno de la RPC y el PCC pueden ejercer influencia sobre ByteDance y, a través de la aplicación TikTok, censurar y dar forma a los contenidos disponibles para los usuarios estadounidenses, de manera que puedan influir en sus opiniones y puntos de vista sobre China.

En abril de 2021, el senador estadounidense Josh Hawley escribió:

TikTok es un caballo de Troya del Partido Comunista Chino que no tiene cabida en los dispositivos gubernamentales –ni en ningún dispositivo americano, para el caso– (...) TikTok ha demostrado en repetidas ocasiones ser un actor pernicioso.

Según Adonis Hoffman, antiguo jefe de personal y asesor jurídico principal de la FCC [Comisión Federal de Comunicaciones], que ha desempeñado cargos jurídicos y políticos en la Cámara de Representantes,

su algoritmo es a la vez sencillo y siniestro. Descárguese la aplicación en su smartphone y habrá dado acceso a China a todos sus datos... Esto representa un tesoro de datos sobre millones de estadounidenses para que el Gobierno chino los utilice cuándo y como quiera. Y la historia demuestra que utiliza esos datos con fines nefastos.

El presidente Joe Biden revirtió el intento de Trump de prohibir TikTok firmando una orden ejecutiva en junio de 2021 que revocaba la prohibición propuesta por su predecesor. En su lugar, ha tratado de resolver los problemas de seguridad con ByteDance mediante un acuerdo negociado con la empresa china que, al parecer, permitiría a TikTok seguir operando en EEUU sin ningún cambio de propiedad.

"Bueno, creo que Donald Trump tenía razón", declaró recientemente el demócrata Mark Warner, presidente del Comité de Inteligencia del Senado.

Quiero decir, TikTok es una enorme amenaza. Así que, si es usted padre y tiene un hijo en TikTok, yo estaría muy, muy preocupado. Todos esos datos que su hijo está introduciendo y recibiendo se están almacenando en algún lugar de Pekín.

Brendan Carr, comisario republicano de la Comisión Federal de Comunicaciones, dijo en noviembre que la única forma de resolver los problemas de seguridad nacional relacionados con TikTok sería prohibir la app. "No creo que haya otro camino que no sea la prohibición", afirmó. Así lo reflejó Axios:

Sencillamente, no existe "un mundo en el que se pueda llegar a proteger los datos lo suficiente como para confiar en que no volverán a manos [del PCC]", afirma Carr.

En octubre, Forbes reveló que un equipo de ByteDance con sede en China había planeado utilizar TikTok para rastrear la ubicación de un número indeterminado de estadounidenses. En diciembre se informó de que ByteDance había utilizado la aplicación para vigilar a varios periodistas con el fin de localizar sus fuentes.

Según el gobernador de Texas, Greg Abbott:

TikTok recopila grandes cantidades de datos de los dispositivos de sus usuarios –incluyendo cuándo, dónde y cómo realizan actividades en internet– y ofrece ese tesoro de información potencialmente sensible al Gobierno chino.

También en diciembre, Indiana se convirtió en el primer estado de EEUU en demandar a TikTok, por engañar a los usuarios sobre la capacidad del Gobierno chino para acceder a sus datos y mostrar contenido adulto a menores.

"La propiedad de TikTok por parte de la compañía es problemática por dos razones", escribieron los republicanos Marco Rubio y Mike Gallagher:

En primer lugar, la aplicación puede rastrear la ubicación de los usuarios de teléfonos móviles y recopilar datos de navegación por internet incluso cuando aquellos están visitando un sitio web no relacionado.

Que TikTok y por extensión el PCC tenga la capacidad de sondear cada pulsación que los adolescentes hacen en sus teléfonos es inquietante. Con esta aplicación, Pekín también podría recopilar información confidencial de seguridad nacional de empleados del Gobierno estadounidense y elaborar perfiles de millones de estadounidenses para utilizarlos con fines de chantaje o espionaje (...)

Sin embargo, aún más alarmante que esa posibilidad son los posibles abusos del algoritmo de TikTok (...)

Su algoritmo es una caja negra, en el sentido de que sus diseñadores pueden alterar su funcionamiento en cualquier momento sin informar a los usuarios (...) en manos de ByteDance, también podría utilizarse para adoctrinar sutilmente a los ciudadanos estadounidenses.

TikTok ya ha censurado referencias a temas políticamente delicados, como el trato a los trabajadores de Xinjiang (China) y las protestas de 1989 en la plaza de Tiananmen. Ha bloqueado temporalmente a un adolescente estadounidense que criticó el trato que reciben los uigures en China. En vídeos alemanes sobre la actitud china hacia los uigures, TikTok ha modificado los subtítulos con términos como "campo de reeducación" y "campo de trabajo", sustituyendo las palabras por asteriscos."

En China, el contenido disponible en TikTok no podría ser más diferente. En China se ofrece la versión espinacas: ciencia, física, ingeniería y patriotismo. En Estados Unidos, TikTok sirve la versión opio. Tristan Harris, antiguo empleado de Google, dijo sobre el enfoque chino de TikTok en el programa de la CBS 60 Minutes:

Es casi como si [los chinos] reconocieran que la tecnología está influyendo en el desarrollo de los niños, y hacen de su versión doméstica una versión espinaca de TikTok, mientras envían la versión opio al resto del mundo.

"Si tienes menos de 14 años, te muestran experimentos científicos que puedes hacer en casa, exposiciones en museos, vídeos sobre patriotismo y vídeos educativos", explica Harris sobre los contenidos que ofrece TikTok en China, y añade que los niños chinos sólo pueden pasar 40 minutos al día en la app.

En una encuesta realizada a preadolescentes de Estados Unidos y China se les preguntó: "¿Cuál es la carrera a la que más aspiras?". En Estados Unidos, la número uno era influencer en las redes sociales, y en China astronauta. Deje que esas dos sociedades se desarrollen durante unas cuantas generaciones y le diré cómo va a ser su mundo.

Hay que prohibir urgentemente TikTok en EEUU y en el resto del mundo libre.

© Gatestone Institute