Las acciones de Tesla atraviesan uno de sus peores momentos en la bolsa. Por diferentes razones, su valor se reduce mes a mes y ya acumula una pérdida del 74% en comparación con noviembre de 2021. La situación se agravó tras la suspensión de actividades en una de las plantas más importante de la compañía, ubicada en Shanghái, China.
En 2020, durante los primeros meses de la pandemia de covid, la empresa fabricante de automóviles eléctricos supo posicionarse como una de las más valuadas de todo el mundo, sacando provecho de sus innovadores modelos y tecnología. Sin embargo, en la actualidad vive uno de sus peores momentos y se encamina a firmar el peor año de su historia, seguido del peor trimestre y peor mes.
A la noticia sobre los problemas en la planta de Shanghái, que obligaron a una suspensión de la producción, se le sumó un informe sobre una serie de descuentos que Tesla estaría ofreciendo para repuntar sus ventas. Estas señales espantaron a los inversionistas y, solo en el mes de diciembre, sufrió una caída del 44% (nunca había caído más de 25% en un mes).
Las distracciones de Musk
Algunos analistas también atribuyen la situación a razones más generales, como la crisis que atraviesa la economía global o el mal momento de China, que llevó a una disminución de la demanda y, por consiguiente, de la producción de autos eléctricos. Sin embargo, la lupa también está puesta en su director ejecutivo y mayor accionista, Elon Musk, quien estuvo centrado en otros negocios personales. Por ejemplo, la compra de Twitter.
Para financiar la compra de la red social, el magnate sudafricano vendió cerca de $40.000 millones. Esta acción fue mal vista por gran parte de los inversores de Tesla y la capitalización bursátil de la empresa llegó a mínimos históricos de $193.000 millones.
