El Gobierno argentino anuncia su primer superávit trimestral desde 2008

Javier Milei celebró el logró de su Ejecutivo, logrado con una gran reducción de los gastos del Estado, a expensas de las obras públicas y las transferencias a gobiernos regionales.

El Gobierno argentino, presidido por Javier Milei, anunció este lunes el cierre de su primer trimestre con superávit fiscal desde 2008. Se trata de la primera vez desde entonces que el país termina un trimestre con las cuentas del Estado en positivo.

El presidente Argentino, Javier Milei, dio la noticia en televisión nacional con una marcada alegría. Este superávit fiscal del 0,2% del PIB se da después de los tres primeros meses del Gobierno del libertario y su método "motosierra" contra el gasto público. Desde su llegada al poder, tal y como prometió durante la campaña, Milei ha llevado a cabo una política de fuertes recortes en la infraestructura del Estado.

“Este milagro económico que ha sido lograr superávit financiero trimestral luego de casi 20 años, habiendo recibido la herencia que recibimos, responde a lo que suelen afirmar los que quieren el fracaso de este Gobierno, en enorme medida a lo que durante la campaña llamamos motosierra, y no como dicen algunos a la licuación del gasto público, método que históricamente se ha utilizado en nuestro país”, celebró el presidente argentino desde la Casa Rosada de Buenos Aires, sede la Presidencia. “El superávit fiscal es la piedra angular desde la cual construiremos la nueva era de prosperidad de la Argentina”, añadió, flanqueados por varios miembros de su Gobierno.

El superávit fiscal del 0,2% para Argentina supone unos 300.000 dólares. El logro viene después de los recortes de casi el 75% de las transferencias estatales a Gobierno regionales en Argentina. La paralización del 90% de las obras públicas, y la muy popular reducción de Ministerios de 18, con el anterior Gobierno, a tan solo nueve. Los bonos argentinos aumentaron su valor poco después del anuncio del presidente.

Para Milei, la reducción del gasto público y el fuerte déficit era un paso obligado en su objetivo de restructuración del Estado argentino. El presidente aseguró que el déficit provoca inflación, su principal enemigo, que en 2023 en Argentina fue la más alta de América al alcanzar el 211,4% a finales del Gobierno de Alberto Fernández.