Sentencian a entre 10 y 15 años de prisión a James y Jennifer Crumbley, los padres del tirador de la escuela de Oxford

Ambos fueron declarados culpables de homicidio involuntario por el crimen que realizó su hijo, que está cumpliendo cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Un juez de Michigan sentenció este martes a James y Jennifer Crumbley, los padres del tirador de la escuela de Oxford (Michigan), a entre 10 y 15 años de prisión. La decisión la conocieron justo después de oír lo que tenían que decir las familias de las víctimas, que aprovecharon su tiempo frente al estrado para mostrar sus sentimientos por lo que sucedió hace unos años. Tras conocer la sentencia, la pareja dispone de hasta 42 días para realizar cualquier tipo de apelación.

El juicio contra ambos comenzó hace unos meses y, el pasado mes de marzo, la Justicia los declaró  culpables de homicidio involuntario por el crimen que realizó su hijo, Ethan, que mató a tiros a cuatro compañeros en noviembre de 2021. Delito por el que está cumpliendo cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Sin embargo, un tribunal de Michigan decidió que culpar únicamente al tirador no era suficiente y decidió imputar también a sus padres, James y Jennifer Crumbley, con cuatro cargos por homicidio involuntario. Según alegaron los miembros del jurado, ambos ignoraron el estado mental en el que se encontraba su hijo e, incluso, le compraron el arma con la que, días después, Ethan cometería el brutal tiroteo que no sólo hirió a siete personas sino que mató a Tate Myre, de 16; Hana Santa Juliana, 14: Madisyn Baldwin, 17; y Justin Shilling, de 17 años.

El histórico juicio por el tiroteo en Oxford

Este juicio ha supuesto un antes y un después ya que, por primera vez, se exige responsabilidad a los padres sobre los actos que cometen sus hijos. Sin embargo, ambos niegan ser responsables de lo sucedido aunque, afirmaron en un primer momento, tampoco habrían cambiado su forma de actuar. "Por supuesto, miro hacia atrás después de que pasase todo esto, y me he preguntado varias veces si habría hecho algo diferente. No lo habría hecho", aseguró durante el juicio Jennifer Crumbley.

Ahora, su respuesta se ha modificado levemente y, en declaraciones recogidas por Detroit News,  aseguró que sí que habría cambiado su forma de actuar y que lamentaba profundamente cómo había actuado su hijo:

En el juicio, cuando subí al estrado y me preguntaron si habría hecho algo diferente, declaré que no lo habría hecho, y eso es cierto sin el beneficio de la retrospectiva que tengo ahora. Con la información que tengo ahora, por supuesto que mi respuesta sería muy diferente. Hay tantas cosas que cambiaría si pudiera volver atrás en el tiempo. Sabía que mi hijo era un chico tranquilo y bueno, que adoraba a sus mascotas. Nunca imaginé que haría daño a otras personas de la forma en que lo hizo.

Por su parte, la abogada de Jennifer Crumbley, Shannon Smith, intentó que la pena impuesta a su cliente fuera mucho menor ya que, aseguró en declaraciones recogidas por BBC, ella "lo ha perdido todo" y no debía pagar por los actos de su hijo durante el tiroteo en Oxford:

En realidad, lo ha perdido todo. Y carga con un bagaje adicional al conocer los horribles actos que su hijo hizo a otras personas y siempre dudando de cada decisión que tomó como madre.