Cuatro agentes de la Patrulla Fronteriza (USBP) se han quitado la vida en sólo dos semanas. La alarmante cifra fue puesta en evidencia por Raúl Ortiz -jefe de la USBP- quien informó del suicidio de dos agentes. La representante Mayra Flores (R) que tuiteó sobre la muerte de un tercero. Y el vicepresidente general del Consejo Nacional de USBP, Sergio Moreno, quien confirmó el deceso de un cuarto agente.
Récord de suicidios
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), de la que forma parte la Patrulla Fronteriza, estableció un récord de 14 suicidios de agentes en 2009. En septiembre de este año, el Washington Examiner informó que en lo que iba de año 11 empleados de CBP se habían quitado la vida. Con los decesos reportados en las últimas dos semanas, la agencia habría superado su máximo histórico anterior.
"Los agentes de la Patrulla Fronteriza se están suicidando a un ritmo récord este año a medida que se incrementan las frustraciones dentro de la agencia por un aumento histórico de la inmigración ilegal bajo la Administración Biden", señala Just The News, quien también envió una solicitud de información a la CBP la cual no fue respondida.
La alarma llega al Congreso
La alerta por el elevado número de suicidios llegó al Congreso, donde el líder de la minoría republicana de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, señalo al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, por no hacer lo suficiente para abordar el problema:
Mayorkas no tiene que lidiar con las fallas fronterizas de la Administración, excepto en las audiencias del Congreso que han sido muy pocas y distantes entre sí bajo el liderazgo demócrata. Los agentes sí, y como sugieren las 14 vidas perdidas en un año, están sufriendo. El suicidio es un grito de ayuda, y con una Administración que no responde al llamado, le corresponde al Congreso actuar.
"Desde que la Administración Biden asumió el cargo, perdimos nuestro propósito", agregó un agente anónimo de USBP, destacando una la sensación de baja moral entre el personal de la CBP.
