Nueva Jersey promulgó una ley para limitar la venta de plástico, pero su consumo se triplicó al poco tiempo

El gobernador Phil Murphy (D) había defendido la legislación, alegando que ayudaría a combatir el cambio climático.

A mediados del 2022, el gobernador Phil Murphy (D) de Nueva Jersey promulgó una ley que prohibía las bolsas de plástico de un solo uso, alegando que la legislación ayudaría a combatir el cambio climático al bajar el consumo de plástico. Sin embargo, menos de dos años después, un estudio encontró que los resultados no fueron exactamente los esperados.

La prohibición, que en ese momento se convirtió en la más estricta del país, les negaba a las tiendas minoristas y de comestibles que les entregaran a sus clientes bolas de plástico de un solo uso.

"Las bolsas de plástico son una de las formas más problemáticas de basura, lo que lleva a millones de bolsas desechadas que fluyen anualmente en nuestros vertederos, ríos y océanos", expresó Murphy en aquel momento.

"Con la histórica firma del proyecto de ley de hoy, estamos abordando el problema de la contaminación por plástico de frente con soluciones que ayudarán a mitigar el cambio climático y fortalecer nuestro medio ambiente para las generaciones futuras", sumó.

La legislación también prohibió los recipientes de comida para llevar de espuma de poliestireno y las pajitas de plástico de un solo uso a menos que un cliente las solicite.

¿El efecto contrario?

Según un estudio realizado por Freedonia Group, la legislación demócrata tuvo exactamente el efecto contrario al buscado con la mencionada ley. Resulta que, desde mayo del 2023, el consumo de plástico en Nueva Jersey no hizo más que aumentar.

"Tras la aplicación de la prohibición de bolsas en Nueva Jersey, el volumen total de bolsas se redujo en más de un 60%, hasta los 894 millones de bolsas. Sin embargo, el estudio también muestra que, tras la prohibición de las bolsas de un solo uso en Nueva Jersey, el cambio del film de plástico a las bolsas alternativas supuso un aumento de casi 3 veces en el consumo de plástico para bolsas", explicaron desde Freedonia Group.

Además, los minoristas enfrentaron cambios significativos en sus operaciones comerciales frontales, debido a la prohibición de las bolsas de plástico.

“Como ya no se les permite ofrecer bolsas de plástico o papel de un solo uso gratuitas, los minoristas ponen a la venta bolsas alternativas para llenar el vacío. Al mismo tiempo, los consumidores están cambiando rápidamente a los servicios de recogida y entrega de comestibles, que normalmente requieren el uso de nuevas bolsas alternativas para cada transacción. Como resultado, las ventas de bolsas alternativas crecieron exponencialmente, y el cambio en los materiales de las bolsas ha resultado rentable para los minoristas”, agregó el estudio.