Nancy Pelosi visita Taiwán

La presidenta de la Cámara de Representantes aterriza en Taipéi, la capital de la isla. Se agudizan las tensiones entre Estados Unidos y China.

Amenazas de bomba, envío de destructores, ataques informáticos... Todo esto ha ocurrido en apenas unas horas a raíz de la filtración de una posible visita de Nancy Pelosi a Taiwán. La tensión entre Estados Unidos y China es ahora toda una realidad después de que la presidenta de la Cámara de Representantes haya finalmente aterrizado en la isla anhelada por el régimen comunista.

El avión de Pelosi ha llegado a Taiwán dentro de la gira por Asia y el Pacífico que ha llevado a la Speaker demócrata a visitar, por el momento, Singapur y Malasia. La presidenta de la Cámara, que ha ido compartiendo cada etapa de su tour asiático, no se ha referido hasta la fecha a la polémica generada ni a las amenazas del régimen chino.

Antes de su aterrizaje en la isla, el Ejército chino ha movido ficha y ha enviado, como demostración de fuerza, un buque destructor a apenas 80 kilómetros de la costa taiwanesa. Al mismo tiempo, Reuters ha informado de un ciberataque contra la página web de la oficina presidencial de Taiwán, mientras que  la agencia de noticias taiwanesa CNA ha reportado un aviso de bomba en el aeropuerto de Taipéi.

El Ejército de Taiwán, por su parte, ha elevado su estado de alerta e incrementado su preparación de combate antes del aterrizaje de la veterana política norteamericana.

Amenazas de China, titubeo de Biden y recibimiento a Pelosi

China lleva días lanzando amenazas a los Estados Unidos ante la visita de Pelosi, la primera de un presidente de la Cámara de Representantes a Taiwán desde 1997. El régimen comunista advirtió de "graves consecuencias" si la Speaker pisaba suelo taiwanés. El pasado jueves, durante una conversación telefónica con el presidente Biden, el dictador chino, Xi Jinping, le advirtió de que "no jugase con fuego" en lo referente a Taiwán. La propia Administración Biden desaconsejó el viaje de Pelosi a la zona a pesar de que los representantes, tanto demócratas como republicanos, defienden la libertad de movimientos de la política frente a las amenazas comunistas. Una ambigüedad de Biden que los analistas interpretan como un síntoma de debilidad ante el régimen chino.

También en Taiwán se sacuden los complejos ante la visita de Pelosi y la reciben con los brazos abiertos. Pese a haberse registrado alguna concentración de ciudadanos prochinos en contra de la visita, el Gobierno taiwanés espera a la presidenta de la Cámara con los brazos abiertos. Así luce el edificio más alto del país en la capital Taipéi: "Speaker Pelosi. Bienvenida a Taiwán. Gracias".