Luego de intensas semanas de negociaciones y de obtener el dictamen de mayoría con disidencias, el megaproyecto Ley de Bases, más conocido como Ley Ómnibus, que el presidente Milei presentó apenas iniciada su gestión y que originalmente contenía 664 artículos que modificaban o derogaban un sinfín de regulaciones del enjambre burocrático argentino, comenzó a ser tratado en la Cámara de Diputados.
Para conseguir la aprobación, el oficialismo realizó una sinuosa danza en la que se mostraba inflexible en las declaraciones mientras negociaba en los hechos, hasta llegar a la nueva versión del proyecto, en la que se eliminaron o modificaron cientos de artículos, y aún se esperan más modificaciones. Casi dos centenares de artículos objetados serán tratados en particular en el debate parlamentario, y, en caso de obtener la mayoría necesaria, el proyecto pasará al Senado, donde una nueva batalla tendrá lugar.
La forzada e histérica maquinaria de protesta profesional gestionada por el sindicalismo y la izquierda hizo su consabido acto de presencia, tratando de conseguir desequilibrar la seguridad callejera. Si bien hasta el momento sólo lograron un par de escándalos menores e imágenes destinadas a ser exitosos memes, la dirigencia sostiene que seguirán en la calle a fin de impedir que se apruebe la ley. Aunque las movilizaciones se convocaron temprano, los incidentes se registraron avanzada la tarde, con focos más intensos cuando efectivos de Gendarmería, Prefectura y Policía Federal se enfrentaron con manifestantes sobre la avenida Entre Ríos, frente al Congreso Nacional, con el objetivo de liberar la calle que las columnas habían ocupado como parte de la protesta. El avance de las fuerzas de seguridad se produjo en etapas en las últimas horas de la tarde. Tras los enfrentamientos se confirmó que un hombre de nacionalidad chilena, de 30 años, fue imputado por los delitos de “atentado y resistencia a la autoridad y lesiones” contra dos agentes de la Prefectura Naval Argentina.
En tanto, en el recinto, la oposición más amigable hizo declaraciones de apoyo a lo largo de la jornada. Así, la Coalición Cívica sostuvo que apoyará el dictamen de mayoría, y el bloque de Hacemos Coalición Federal anticipó que votará la herramienta propuesta por el oficialismo: “Venimos a darle una herramienta al país, porque la necesita un Gobierno pero sobre todo una sociedad que está sufriendo hace rato”.
La Unión Cívica Radical (UCR) confirmó que acompañará la Ley Ómnibus. Rodrigo de Loredo sostuvo al respecto: "La realidad es que esto excede las reformas de Menem, Duhalde, De la Rúa, Néstor Kirchner y Macri", y cargó contra el kirchnerismo por tener una actitud destructiva e hipócrita, agregando: "Sepa el pueblo argentino que este Gobierno tiene las herramientas para llevar el plan de gestión que el pueblo ha votado".
Al promediar la tarde de ayer, Mauricio Macri se manifestó en redes en apoyo a la Ley de Bases diciendo: “Hoy es un día muy importante porque se va a votar una ley fundamental para comenzar un cambio en la Argentina. Por eso apoyo la ley que presentó el Gobierno. Al mismo tiempo, hoy vamos a poder ver a dos grupos en acción: los que se empeñan en mantener sus privilegios buscando trabar al Gobierno y los decididos a avanzar hacia el cambio”.
Hoy es un día muy importante porque se va a votar una ley fundamental para comenzar un cambio en la Argentina. Por eso apoyo la ley que presentó el gobierno. Al mismo tiempo, hoy vamos a poder ver a dos grupos en acción: los que se empeñan en mantener sus privilegios buscando…
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) January 31, 2024
El Gobierno detalló este miércoles lo que quedaba de la ya muy menguada ley original. La decisión que se tomó en Labor Parlamentaria fue que estas modificaciones se anuncien antes de empezar el debate. El kirchnerismo quiso aprovechar la supresión de artículos para hacer caer la sesión. El jefe del bloque, Germán Martínez, denunció que el texto del proyecto "es un mamarracho nunca visto, parecía una bingo", en referencia a la cantidad de artículos que entraron y salieron. "Si quieren cuidar al presidente de la nación, hagan que el tema vuelva a comisión", solicitó, y esto pasó a la votación, pero fue rechazado con 149 votos contra 103 que votaron a favor. Una buena señal para el presidente Milei.
El secretario parlamentario, Tomás Figueroa, leyó toda la supresión de los artículos. A la quita del paquete fiscal que el ministro de Economía, Luis Caputo, había anunciado se sumaron artículos sobre la metodología de toma de deuda externa hasta la irrisoria disposición de que una reunión de más de tres personas debía ser notificada a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, entre otros cuestionados puntos del proyecto de La Libertad Avanza. También quedó fuera el capítulo que modifica el régimen de la pesca a pedido de los gobernadores patagónicos. De las once facultades delegadas que pidió Javier Milei, sólo quedaron la económica, la financiera, la de seguridad, la tarifaria, la energética y la administrativa.
Se espera que el oficialismo logre la aprobación del proyecto en general. Eso podría suceder luego de las más de 40 horas de debate que se calcula podría durar la sesión completa. A pesar de este apoyo, el Gobierno podría sufrir varios golpes durante el debate del articulado en particular, por ejemplo en los artículos referidos a las privatizaciones de empresas públicas o las facultades delegadas que el Poder Ejecutivo pretende arrogarse. Si bien el oficialismo accedió a reducirlas, varios diputados, además del kirchnerismo y la izquierda, insisten en su negativa a otorgar poderes especiales al Poder Ejecutivo.
Pasadas las 21:30, los diputados levantaron la sesión, que retoman este jueves a las 12 del mediodía. La mayoría de los legisladores apoyaron la decisión, aunque el peronismo se quejó y dijo que quería seguir. Con esta dilación, el oficialismo no logró aún que el proyecto de Ley de Bases sea votado en general a causa de la kilométrica lista de oradores anotados para opinar en el recinto: aún restan 140, que lo harán el jueves a partir del mediodía. Sólo este miércoles fueron once horas de sesión. Se espera que la votación en general sea luego de 20 horas de debate, pero los momentos más controvertidos llegarán después, con la votación en particular, donde se definirá la letra chica.
Mientras tanto, Milei pasó la jornada en la residencia presidencial de Olivos, donde sus allegados sostienen que se respira un clima de tranquilidad y buen ánimo. Fuentes oficiales informaron que, mientras el debate se caldeaba en el Congreso, el presidente recibía buenas noticias, como que el FMI desembolsará los 4.700 millones de dólares para el pago de la deuda y que a la Argentina llegaría un grupo de empresarios tech para evaluar posibles inversiones.
