El coche eléctrico parece tener un largo camino por delante antes de poder ser una verdadera alternativa a la flota de automóviles que usan gasolina en los Estados Unidos. Su utilización a escala nacional podría aumentar la demanda anual de energía en un 40% en los próximos años.
1. Los vehículos eléctricos dependen de las centrales eléctricas basadas en combustibles fósiles como el carbón, el petróleo o el gas natural, que soportan alrededor del 60% de la red eléctrica de Estados Unidos, mientras que la energía nuclear representa el 20%. Buena parte de esta energía será consumida por los coches eléctricos.
2. Las baterías de los vehículos eléctricos requieren de cobalto, que proviene en un 70% de la República Democrática del Congo, nación con condiciones de trabajo tremendas, en especial para los niños.
3. Casi un tercio de las estaciones de carga eléctrica de San Francisco no funcionan, según un estudio realizado por el grupo ambiental sin fines de lucro Cool the Earth.
4. El uso de la energía eléctrica se prevé que cause más tensión a la red y ocasione mayores costos de energía e infraestructura.
5. Según los estudios realizados, el esfuerzo de cargar un vehículo eléctrico es similar al uso de "uno o dos aires acondicionados" en el hogar; pero un coche eléctrico requiere energía todo el año, según recuerda Ram Rajagopal, profesor asociado de Ingeniería Civil y Ambiental en la Universidad de Stanford.
6. Unos 20 millones de familias estadounidenses, o una de cada seis, se han atrasado en sus facturas eléctricas por los altos costes, lo que hace poco atractiva la opción del coche eléctrico.
7. Las compañías de servicios públicos deberán pagar 5.800 dólares en actualizaciones por cada nuevo vehículo eléctrico durante los próximos ocho años para compensar la demanda de energía. Finalmente, todos los clientes terminarían pagando ese costo.
8. El precio promedio de un vehículo eléctrico es actualmente de 66.000 dólares, 18.000 más que el del coche que utiliza gasolina.
9. La mayoría de las cargas de coches eléctricos se realiza en viviendas particulares. En los edificios resulta más difícil; quienes viven en apartamentos están en desventaja para cargar, según nuevas investigaciones.
10. Los estudios revelaron que muchos conductores cargan sus vehículos eléctricos durante la noche, cuando la energía solar está menos disponible en la red general.
