La alcaldesa de L.A. Karen Bass declara el estado de emergencia por la crisis de personas sin hogar

La mandataria recién electa informó que su plan de gobierno buscará refugiar 17.000 personas sin techo en su primer año de mandato.

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, declaró la falta de vivienda en la ciudad como un "estado de emergencia". En una conferencia de prensa ofrecida en su primer día en el cargo, la mandataria informó que ante el aumento de la indigencia, su plan de gobierno buscará refugiar a los miles de personas que viven en las calles:

Es una crisis humanitaria que cobra la vida de cinco personas todos los días (...) Debemos construir viviendas más rápido y lo haremos, debemos coordinar el alojamiento y los servicios y así lo haremos. Mi declaración de emergencia desbloquea herramientas y poderes para asegurarnos de que estemos utilizando todos los recursos posibles en la escala necesaria para salvar vidas y restaurar nuestros vecindarios.

El último sondeo realizado por el Departamento de Servicios para Personas sin Hogar de Los Ángeles, reveló que había 41.980 personas sin hogar en la ciudad, un 1,7% más que en 2020. El número de homeless en L.A. es 18 veces mayor a las cifras que presenta la ciudad de Nueva York y 14 veces más en comparación con Chicago.

Viviendas para 17.000 personas

Bass presentó un plan para proporcionar vivienda a 17.000 personas en su primer año de mandato. Asimismo, dijo que utilizaría métodos "no tradicionales" para frenar la crisis de los homeless que azota L.A. desde hace años:

No habrá demoras en mi guardia (...) El Centro de Operaciones de Emergencia y la estrategia efectiva contra la falta de vivienda no se pueden ejecutar como cualquier otra función de la ciudad. Aumentaremos la escala y la velocidad del enfoque de la ciudad para las personas sin hogar al eliminarlo de la forma tradicional de hacer las cosas del ayuntamiento.

 También comparó la crisis de los sin techo con los peores desastres naturales que se han vivido el condado:

La tasa de mortalidad y el desplazamiento masivo de la crisis de personas sin hogar en Los Ángeles excedieron los de nuestros desastres naturales más trágicos como el terremoto de Northridge y el huracán Harvey.

Además, señaló que su plan incluye la identificación de edificios en toda la ciudad que podrían usarse para vivienda, y el alquiler de habitaciones en moteles para refugiar a personas sin hogar. Recalcó que "reducir drásticamente la falta de vivienda en las calles, acabar con los campamentos callejeros y liderar el tratamiento de la salud mental y el abuso de sustancias" serán su primer objetivo.