La Administración Biden gastará $100 millones de fondos federales en instalar puntos de recarga para vehículos eléctricos

La financiación está contemplada en la ley de infraestructura de 2021 y se destinará a remplazar o reparar un centenar de cargadores en todo el país.

La Administración Biden anunció este miércoles que destinarán fondos federales por valor de $100 millones para mejorar la infraestructura que dé servicio a los vehículos eléctricos en todo el país. El mayor obstáculo para los carros de energía renovable es la autonomía y los diseminados puntos de carga en la carretera.

A lo largo de la red de carreteras del país, hay más de un centenar de puntos de carga que no se encuentran disponibles. El plan de financiación aprobado por el Gobierno pretende remplazar o sustituir cien de estos cargadores. Esta financiación está contemplada en la ley de infraestructura de 2021, que tuvo la aprobación de los dos partidos en el Congreso.

El anuncio del Gobierno federal llega apenas cuatro días después del viaje de Jennifer Granholm, secretaria de Energía, que se lanzó en una travesía del país a bordo de un vehículo para probar su eficacia. No fue un periplo exento de problemas. El interior del país, con grandes extensiones y pocos puntos de carga, es un lugar a menudo calificado como inhóspito para los vehículos eléctricos.

Pocos cargadores y largos tiempos de carga

A este problema se añade el de la espera. Los cargadores más rápidos permiten que el vehículo esté recargado en unos 20 minutos (y sólo los automóviles más modernos), mientras que siguen existiendo puntos que obligan a esperar más de una hora para poder seguir adelante. Para incentivar los cargadores rápidos, la Administración tan solo está subvencionando puntos de carga de 150 kilovatios o más potentes.

Durante el tour de Granholm, se vivió una situación que ilustró perfectamente los problemas de los cargadores eléctricos. El séquito de vehículos que seguía al de Granholm bloqueó durante demasiado tiempo uno de los puntos de carga en el estado de Georgia. Una familia enfurecida acabó llamando a la Policía, que se personó en el lugar.

Según las últimas estimaciones de la Administración Biden consultadas por el Washington Examiner, en Estados Unidos circulan más de 3 millones de vehículos eléctricos y hay unos 103.000 cargadores públicos disponibles, lo que equivale a un cargador público por cada 29 vehículos eléctricos.