Kim Jong Un destituye al jefe de Estado Mayor de Corea del Norte

El líder norcoreano Kim Jon Un ordenó a sus ejércitos que se "preparen para una guerra", en pleno contexto de tensiones con occidente y Corea del Sur.

El líder del régimen norcoreano, Kim Jong Un, quiere que sus fuerzas armadas se "preparen para una guerra". El comentario se acompañó este jueves con una remodelación de la cúpula militar. El líder supremo Kim Jong-Un ordenó la destitución del jefe de Estado Mayor y su sustitución.

El general Pak Su Il perdió su puesto al frente de las fuerzas armadas de Corea del Norte a favor del que era su segundo al cargo, el vicemariscal Ri Yong Gil. En Corea del Norte, el de vicemariscal es el segundo rango militar más alto, después del de mariscal, wonsu, que ostenta el líder supremo de la República Popular Democrática de Corea.

Un veterano del partido único

Ri Yong Gil es un alto cargo del partido único de Corea del Norte. Fue ministro de Seguridad Social en 2021, además de ministro de Defensa poco después. En el seno del partido único, es el vicepresidente de la Comisión Militar.

No fue el único cambio del que la agencia estatal de noticias, KCNA, dio parte este jueves. Junto a Pak Su Il, un número no detallado de puestos de responsabilidad en las fuerzas armadas sufrieron cambios y destituciones. De acuerdo con las declaraciones para CNN de Cheong Seong-Chang, analista coreano del Sejong Institute, existen distintas razones por las que el régimen podría haber hecho estos cambios. Las razones no son necesariamente "punitivas".

Tensión con occidente

Corea del Norte mantiene el nivel de tensión militar en la península de Corea. Por ello sus fuerzas armadas requieren de constantes actualizaciones. En los últimos meses y con objetivos disuasorios, el régimen de Kim Jon Un ordenó en repetidas ocasiones el lanzamiento de misiles balísticos en el mar de Japón. Recientemente, el régimen norcoreano también distribuyó a los medios internacionales una serie de fotografías del líder probando nuevas armas ligeras. De acuerdo con la KCNA, Kim Jong Un pidió a las fábricas un aumento de la producción de munición.

Las advertencias del régimen norcoreano subieron de tono cuando Estados Unidos envió por primera vez desde 1980 un submarino de guerra a las aguas de la península de Corea para participar en ejercicios junto a Corea del Sur.