La compañía Gap Inc. anunció que recortará 1.800 empleos dentro de un plan de reestructuración y reducción de costos. Los despidos se llevarán a cabo en puestos de responsabilidad (corporativos) y afectarán al personal que trabaja en la sede central en San Francisco (California).
Según un documento presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC):
La dirección de la empresa se comprometió a llevar a cabo un plan de reestructuración (el "Plan") que incluye una reducción de la plantilla de la sede central y de la plantilla de campo superior de la empresa en aproximadamente un 50%.
663f8ce0-dbea-4e43-8fa3-e1c... by Verónica Silveri
La empresa -que también incluye las marcas Old Navy, Banana Republic y Athleta- se suma de esta forma al gran número de compañías -Meta, Twitter, Walmart, PayPal, Amazon, Disney, Goldman Sachs, Google- que llevan meses reduciendo su plantilla por la crisis económica. Hasta enero de 2023, Gap contaba con una plantilla de unos 95.000 empleados
El plan de reestructuración de Gap
Bob Martin, director ejecutivo interino de la empresa, indicó que se estaban "tomando las medidas necesarias para remodelar Gap Inc. para el futuro" y "simplificar y optimizar su estructura y modelo operativo" en sus marcas:
Estos cambios incluyen las estructuras consistentes de liderazgo de marca (...) con el objetivo de aplanar la estructura organizativa para mejorar la calidad y la velocidad de la toma de decisiones, al mismo tiempo que se reducen los gastos generales.
En relación con la reestructuración, la empresa calcula "que incurrirá en unos costes totales antes de impuestos de entre 100 y 120 millones de dólares en relación con el plan, que consisten en unos costes relacionados con los empleados de entre 75 y 85 millones de dólares y unos costes de consultoría de entre 25 y 35 millones de dólares".
La empresa prevé que las acciones relacionadas con la reducción de la plantilla personal le permitan ahorrar anualmente unos 300 millones de dólares (antes de impuestos).
Despidos previos y caída en las ventas
En septiembre del año pasado, la empresa eliminó 500 puestos de trabajo corporativos en San Francisco y Nueva York. Los recortes se produjeron poco después de que la compañía informara que planeaba reducir los costos (250 millones de dólares) y aumentar la rentabilidad.
En el año fiscal 2022, sus ventas netas cayeron un 6%, a 15,6 mil millones de dólares.
