Estupor en el Departamento de Policía de Nueva Orleans: "Las ratas se están comiendo nuestra marihuana"

"Están todas drogadas", señaló la superintendente Anne Kirkpatrick, quien también reveló que las instalaciones albergan plagas de cucarachas, moho, falta de aire acondicionado y baños y ascensores que no funcionan.

El Departamento de Policía de Nueva Orleans está minado de ratas "drogadas" con marihuana.  Según informó la superintendente del departamento, Anne Kirkpatrick, los roedores se infiltraron en la sala de pruebas de la oficina e ingirieron la droga:

Las ratas se están comiendo nuestra marihuana. Están todas drogadas.

Ante los miembros del consejo en una reunión del Comité de Justicia Penal, Kirkpatrick aseguró que no sólo presentan el problema de las ratas. Las instalaciones del departamento "albergan plagas de cucarachas, moho, falta de aire acondicionado y baños y ascensores que no funcionan", según WWL Louisiana.

Un trabajo "en condiciones que no son aceptables"

Kirkpatrick indicó que en reiteradas ocasiones el personal llega a ejercer sus labores y encuentra excremento de rata en sus puestos de trabajo. Asimismo, declaró que las condiciones de trabajo pueden bajar la moral de los empleados. Todo esto sucede mientras el departamento lucha con problemas récord de escasez de personal tras la desfinanciación policial de 2020:

Cuando decimos que valoramos a nuestros empleados, no se puede decir eso y al mismo tiempo permitir que la gente trabaje en condiciones que no son aceptables (...) El lugar donde trabajas, donde vives no es apropiado, eso afectará la moral, así que ese ha sido un factor importante.  No es sólo en la jefatura de policía. Es en todos los distritos. La suciedad está fuera de serie (...) El (equipo) de limpieza merece un premio por tratar de limpiar lo que no se puede limpiar.

Los líderes de la ciudad discutieron sobre un plan para aprobar un contrato de arrendamiento para trasladar la sede a un nuevo edificio. Este será firmado con una duración de 10 años y costará alrededor de 670.000 dólares al año, sumado a unos 300.000 dólares estimados para mover al personal a la nueva ubicación. La mudanza está prevista para mayo de 2024, aunque aún se espera la votación final del consejo para su aprobación.