Cada vez son menos las personas partidarias del control de armas
"Las peticiones sobre las leyes de armas más estrictas han disminuido desde junio". Un estudio evidencia que el apoyo público al control de armas se eleva después de tiroteos masivos.
Una encuesta de Gallup reveló que el apoyo de los estadounidenses a una legislación más estricta en materia de armas de fuego se redujo al 57% después de haber aumentado considerablemente (66%) en junio, tras los dos tiroteos masivos ocurridos en Uvalde (Texas) y Buffalo (Nueva York).
Otro 32% de los ciudadanos dijo que las leyes sobre el control de armas deberían mantenerse como están ahora, y un 10% querría que fueran menos estrictas. El estudio señala:
Menos restricciones para las armas
Una tendencia a la baja en el apoyo a más restricciones a las armas es lo que une los tres grupos políticos encuestados: el 86% de los demócratas piensan actualmente que las leyes sobre la venta de armas deberían ser más estrictas, frente al 94% de junio. Lo mismo sucede con los independientes: 60% frente al 66% de hace 6 meses. Y el 27% de los republicanos afirman que las leyes sobre la venta de armas deberían ser más estrictas frente al 38% de junio.
El apoyo actual de los independientes a unas leyes más estrictas son 14 puntos más que hace un año, mientras que el de los demócratas es 5 puntos inferior y el de los republicanos es casi el mismo.
Posesión de armas en el hogar
Desde 2005, la tenencia personal de armas se ha mantenido en una media del 30%. El 46% de los estadounidenses afirma que hay un arma de fuego en su vivienda, de los cuales el 33% dice que posee una personal y el 13% dice que otro miembro del hogar es el propietario del arma.
La tenencia de armas varía en mayor medida según el partido político: los republicanos superan por más de doble (48%) a los de demócratas (20%) que afirman poseer un arma personalmente. Además, el 66% de los republicanos vive en un hogar con un arma, mientras que sólo el 31% de los demócratas lo hace.
Asimismo, la mayoría de las personas con ingresos anuales de 100.000 dólares o más (63%), los residentes en ciudades o zonas rurales (62%), los sureños (59%) y los hombres (51%) viven en hogares con un arma y son más propensos a poseer una personalmente que otros ciudadanos.