Una exvoluntaria del HHS denuncia la explotación laboral y sexual que sufren los niños inmigrantes
"La Administración Biden niega las consecuencias de sus políticas (...) Actúa como si esto fuera una reunificación familiar (...) Y están incentivando y permitiendo el tráfico de niños", señaló Jessica Vaughan.
Una exvoluntaria del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) denunció en una entrevista para Project Veritas cómo el Programa de Niños Extranjeros No Acompañados (UAC) "importa" adolescentes -menores de 18 años- de países pobres de Latinoamérica para ponerlos a disposición de los "patrocinadores" quienes los explotan laboralmente y en algunos casos sexualmente.
Los patrocinadores
El UAC permite la entrada al país para los inmigrantes menores de edad. El proceso consiste en entregar a los adolescentes y niños al HHS. Luego, este los transfiere rápidamente a los patrocinadores, "muchos de los cuales son ilegales que antes pagaron a coyotes y cárteles para que llevaran a los jóvenes a la frontera".
Los patrocinadores son personas escogidas por el HHS y son los encargados de acoger a los niños. Según la ley federal, los menores tienen derecho a inscribirse en las escuelas públicas de sus comunidades y beneficiarse de los servicios educativos, igual que los demás estadounidenses.
"Poner a los niños en manos de delincuentes"
Tara Lee Rodas -la denunciante- fue voluntaria para el HHS en Pomona, California. Confesó que la Administración Biden "ha relajado mucho la investigación estricta de quienes son los patrocinadores" y que en la actualidad son tantos los niños que llegan a la frontera que se prioriza "la velocidad sobre la seguridad":
El proceso legal que hace el HHS también otorga a los patrocinadores un "inmenso control" sobre los menores, lo que hace que estos se puedan sentir amenazados. Según Rodas:
Breitbart News señaló que "la prisa de los funcionarios actuales por transferir a los niños de la frontera a sus patrocinadores se produce después de que los demócratas criticaran a los agentes de inmigración del expresidente Trump" por preferir dejar a los menores en refugios.
Tráfico laboral y sexual "asistido por el gobierno"
"La Administración Biden niega las consecuencias de sus políticas y, en cambio, actúa como si esto fuera simplemente una reunificación familiar benigna o un programa de protección infantil (...) De hecho, están incentivando y permitiendo el tráfico de niños", dijo Jessica Vaughan, directora de estudios de política en el Centro de Estudios de Inmigración.
Entre muchos testimonios, un periodista de Veritas habló con una menor inmigrante, que reveló que había sido sufrido abusos sexuales por parte de su patrocinador:
Lee Rodas también expuso el tráfico laboral del programa. Los niños -en vez de asistir a la escuela- son llevados a distintos estados para trabajar en restaurantes y fabricas. Así pueden pagar sus deudas con los cárteles y coyotes que los ayudaron en su traslado. A mediados de noviembre, el Departamento de Trabajo reconoció que algunos adolescentes llegan al país para trabajar "en ocupaciones peligrosas":
"Honestamente, creo que casi todos en el sistema saben que la mayoría de los adolescentes inmigrantes vienen a trabajar y envían dinero a casa", comentó Maria Woltjen, directora ejecutiva y fundadora del Centro Joven por los Derechos de los Niños Inmigrante.
Culpan a Mayorkas
En Breitbart News denuncian que "el tráfico de niños cuenta con la ayuda del jefe fronterizo de Biden, Alejandro Mayorkas, quien "está utilizando su autoridad legal, su presupuesto, y el poder diplomático, para ganar el control del negocio migratorio de los cárteles".
También, denuncian que Mayorkas ha estado "reimportando" a inmigrantes que fueron deportados por los jueces durante la Administración Trump. Y apuntan a los "pocos esfuerzos" que han hecho los republicanos "para investigar el tráfico laboral de UAC o para poner en evidencia a los demócratas por su respaldo al tráfico laboral y la prostitución infantil".
Mientras tanto, "los progresistas aplauden el programa que ha permitido la entrada al país de 290.000 niños y adolescentes desde enero de 2021". "La mayoría de los cuales llegan listos para trabajar".