¿Qué piensa de la guerra Keith Kellogg, enviado especial de Trump para Ucrania y Rusia?
Asesor del republicano durante su primer mandato, recientemente afirmó que Estados Unidos debería condicionar la ayuda militar a Kiev a que se siente en la mesa de negociación con Rusia.
El presidente electo Donald Trump llamó a las filas de su Administración al general retirado Keith Kellogg (80) como enviado especial para Ucrania y Rusia.
"Juntos garantizaremos la PAZ A TRAVÉS DE LA FUERZA, y haremos que Estados Unidos y el mundo vuelvan a ser SEGUROS", aseguró el presidente. Kellogg formó parte del primer mandato de Trump, ocupando varios cargos vinculados a la seguridad nacional.
Desde el círculo íntimo del 47° presidente destacan su lealtad durante aquel período y su conocimiento de geopolítica. El propio Trump aludió a su cercanía con Kellogg al designarle el cargo: "¡Estuvo conmigo desde el principio!".
Poner fin a la guerra en Ucrania fue una de las principales promesas de campaña del republicano en el ámbito internacional, entre otras como hacer frente a China. El nombramiento se produce en medio de una escalada retórica y militar entre Kiev y Moscú; quienes, según diversos analistas, estarían buscando mejorar sus posiciones en el terreno antes de la inauguración de Trump.
"Una simple chispa puede descontrolar las cosas"
En una reciente entrevista a Fox, cuyos estudios suele frecuentar, Kellogg aseguró que "estamos justo en el precipicio" de la Tercera Guerra Mundial. El futuro asesor de la Casa Blanca señaló que Corea del Norte, China, Irán y Rusia se han acercado en los últimos cuatro años. Que están "alimentándose mutuamente". Como ejemplo mencionó las tropas norcoreanas que combaten para Rusia.
El conflicto allí, aseguró entonces, sería el mayor desafío de Trump en el ámbito internacional. "Una simple chispa puede descontrolar las cosas".
Es copresidente del Centro para la Seguridad Estadounidense de America First Policy Institute (AFPI). En un artículo que escribió para el AFPI a principio de año, asegura que la "incompetencia" y el "mal liderazgo" de Joe Biden llevaron a la invasión de Ucrania en febrero de 2022.
Nunca hubiese sucedido, afirmó, con Trump en el Salón Oval.
"Estados Unidos necesita un nuevo enfoque y una estrategia global para la guerra de Ucrania", aseguró. Nueva visión que incluye la certeza de que una guerra prolongada no beneficia al país. Ucrania enfrenta serios problemas, como dificultades en el reclutamiento, y a largo plazo probablemente empezará a perder terreno. Además, la continuación del conflicto acercará más a Pyongyang, Pekín, Teherán y Moscú.
"America Primero no es aislacionista", aseguró. Parece, más bien, un esfuerzo por elegir mejor las batallas a pelear: "La guerra está reduciendo el arsenal estadounidense de armas avanzadas, como los misiles HIMARS, que pueden ser necesarios en otros conflictos, especialmente si China invade Taiwán".
Mundo
Rusia engaña a ciudadanos yemeníes para reclutarlos para la guerra en Ucrania
Leandro Fleischer
Para poner fin a la guerra, Estados Unidos debería pactar un "alto al fuego y una solución negociada". Mientras tanto, tiene que seguir armando a las tropas ucranianas bajo la condición de que Kiev participe en conversaciones de paz.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) también debe comprometerse a aplazar la adhesión de Ucrania, uno de los motivos por los cuales Vladimir Putin avanzó sobre su vecino. Rusia también se podría beneficiar con "un alivio limitado de las sanciones", aunque, propone, deberían haber gravámenes a la energía rusa para ayudar en la reconstrucción ucraniana.
Kellogg y Fred Fleitz, coautor del artículo y también exasesor de Trump, resumen su meta en una frase del republicano en un town hall el año pasado: "Quiero que la gente deje de morir".