Esta tarde, durante una reunión con líderes de la comunidad judía, el presidente Joe Biden había confirmado los informes de que Hamás decapitó a niños en Israel tras diversos reportes de la prensa internacional sobre 40 niños supuestamente asesinados por el grupo terrorista.

"Es importante que los estadounidenses vean lo que está ocurriendo. Llevo mucho tiempo haciendo esto. Nunca pensé que vería... tendría imágenes confirmadas de terroristas decapitando niños", dijo Biden durante una mesa redonda en la Casa Blanca con los líderes judíos. "Restar importancia a las atrocidades de Hamás y culpar al pueblo judío es impensable".

No obstante, horas más tarde, un portavoz de la propia Casa Blanca desmintió a Biden aclarándole a The Washington Post que las declaraciones se basaron en información no corroborada de forma independiente.

"Un portavoz de la Casa Blanca aclaró más tarde que los funcionarios americanos y el presidente no han visto imágenes ni han confirmado tales informes de forma independiente. El presidente basó sus comentarios sobre las supuestas atrocidades en las afirmaciones del portavoz de Netanyahu y en informes de medios de comunicación de Israel", se lee en la cobertura en vivo del WaPo sobre la guerra entre Israel y Hamás.

La noticia —divulgada a nivel global— de que Hamás había asesinado bebés en Israel nació del informe de una reportera de i24 News, quien durante una visita al kibutz Kfar Aza dijo que un comandante de las Fuerzas de Defensa de Israel le informó que habían encontrado los cadáveres de unos 40 bebés, algunos de los cuales habían sido decapitados.

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Nota de editor: este artículo, en primera instancia, solo había cubierto las declaraciones iniciales de Biden y fue publicado con un título diferente al actual