11 de Julio: tres años del día en que Cuba alzó la voz y fue reprimida por el régimen comunista
En 2021 miles de cubanos se manifestaron en toda la isla, exigiendo cambios por la crisis económica, deficiencias del sistema de salud y la aguda falta de libertades.
Este 11 de julio se conmemora el tercer aniversario de las históricas protestas en Cuba, un día que no solo representa el coraje del pueblo cubano en su demanda de libertad, sino también el inicio de una intensa escalada represiva por parte del régimen de Miguel Díaz-Canel.
Esta fecha también sirve como un momento de reflexión sobre los 65 años de violaciones sistemáticas de derechos humanos en Cuba, un legado oscuro que ha definido a la isla desde el ascenso de Fidel Castro al poder en 1959.
El 11-J: un grito de libertad en Cuba
El 11 de julio de 2021 fue un día decisivo en la historia de Cuba. En un fenómeno sin precedentes, miles de cubanos se manifestaron en al menos 62 municipios de toda la isla, exigiendo cambios en un contexto de crisis económica, deficiencias del sistema de salud exacerbadas por la pandemia de COVID-19 y una aguda falta de libertades.
Las movilizaciones no solo fueron un grito de desesperación, sino una demanda firme de libertad y reforma política en una nación oprimida por décadas de régimen comunista.
La escalada de la represión tras el 11-J
La respuesta del régimen cubano a estas protestas pacíficas fue una represión implacable. Desde el 11-J, Miguel Díaz-Canel y su régimen han intensificado su estrategia de control y represión, llevando la situación de los derechos humanos en Cuba a niveles alarmantes.
Desde el 11-J, el número de presos políticos en Cuba ha aumentado dramáticamente. Actualmente, más de 1.113 personas permanecen encarceladas por motivos políticos, consolidando a Cuba como el país con el mayor número de presos políticos en América Latina, según datos de Prisoners Defenders.
El régimen ha recurrido a diversas tácticas represivas para silenciar a los disidentes. Se han llevado a cabo cortes de internet para evitar la difusión de noticias y se han utilizado turbas organizadas para atacar a los manifestantes. Además, la tortura de prisioneros ha aumentado, evidenciando el desprecio del régimen por los derechos humanos y la justicia.
De acuerdo al Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), en el primer semestre de 2024, se registraron al menos 1.932 actos represivos contra civiles en Cuba. Entre estas acciones, se destacan 488 detenciones arbitrarias y 462 confinamientos ilegales en domicilios.
Un legado de violaciones de derechos humanos
Aunque han transcurrido tres años desde las históricas protestas del 11 de julio de 2021, los cubanos han estado soportando violaciones sistemáticas de derechos humanos durante 65 años bajo el régimen comunista. Desde el ascenso de Fidel Castro al poder en 1959, la Revolución Cubana ha estado marcada por una serie de prácticas represivas que han definido la dura realidad de la isla.
Desde el inicio de la Revolución, el régimen de Castro y sus sucesores establecieron un sistema de represión que, con el tiempo, se ha intensificado notablemente. En 1959, Cuba contaba con 14 cárceles para una población de 6 millones de habitantes. A lo largo de 65 años, este número creció exponencialmente, alcanzando cerca de 293 centros penitenciarios en la actualidad. Este incremento refleja un uso sistemático del sistema penitenciario como herramienta de represión política.
Las cárceles cubanas se han convertido en lugares de detención para miles de presos políticos, muchos de los cuales han sido sometidos a torturas y han vivido en condiciones inhumanas. Según Sébastien Touzé, vicepresidente del Comité contra la Tortura de la ONU, en mayo de 2022, Cuba tenía una de las tasas de encarcelamiento más altas del mundo.
Además de este notable crecimiento en la infraestructura carcelaria, el régimen cubano ha llevado a cabo diversas medidas represivas desde sus inicios. Entre ellas se encuentran fusilamientos y torturas, que el historiador R.J. Rummel estima han causado entre 35.000 y 141.000 muertes por represión política y ejecución de adversarios.
A lo largo de los años, el régimen también ha estado involucrado en desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales. Un ejemplo destacado de estos abusos es el ataque del Trece de Marzo en 1994, donde desaparecieron al menos 37 personas, incluidos niños, a manos de la policía política cubana.
Otro caso emblemático es el asesinato de los líderes opositores Oswaldo Payá y Harold Cepero en 2012, con una posible participación de agentes estatales, según un informe de la OEA.
Cuba no solo ha reprimido a sus ciudadanos, sino que también ha extendido su influencia represiva al apoyar políticas de tortura en Venezuela. Se ha reportado que Cuba ha sido responsable de represión y tortura en el contexto de la crisis venezolana, un hecho que Luis Almagro, secretario general de la OEA, ha destacado como un grave incumplimiento de los derechos humanos en la región.
El acuerdo con la Unión Europea: un contraste entre palabras y hechos
En 2016, la Unión Europea firmó un Acuerdo Político y de Cooperación con Cuba que incluía la protección de los derechos humanos como una de sus condiciones fundamentales y que ha permitido la canalización de cientos de miles de euros a la dictadura. Sin embargo, el aumento de la represión desde el 11-J ha mostrado un claro incumplimiento de estas condiciones.
La Asociación Española Cuba en Transición ha solicitado al Gobierno español que abandone su postura de silencio cómplice con el régimen cubano y que exija la liberación de los presos políticos, el respeto a los derechos humanos en Cuba y garantías de que los fondos europeos no fortalezcan al régimen cubano.
Conmemoración el 11-J
En el tercer aniversario del 11-J, se llevan a cabo diversas actividades y eventos para recordar las protestas y continuar la presión sobre el régimen cubano. Entre estas actividades se incluyen manifestaciones y actos de conmemoración en ciudades internacionales para mantener viva la memoria de los eventos del 11-J y visibilizar la situación de los derechos humanos en Cuba.