India: Narendra Modi refuerza sus expectativas de mayoría en la última fase de las elecciones generales
El líder de Bharatiya Janata usó una retórica violenta a lo largo de toda la campaña que le propulsa para convertirse en el primer líder con tres mandatos consecutivos desde la independencia.
Este sábado concluyen las macro-elecciones en la India, los comicios de mayor tamaño del mundo que se organizan en varias fases. Las estimaciones siguen dando al partido del actual primer ministro Narendra Modi como el más votado. Según los sondeos, podría superar por mucho su resultado de 2019 y volver a obtener la mayoría absoluta en el Parlamento indio, la Lok Sabha. Se convertiría así en el primer líder indio desde Jawaharlal Nehru (1947-1964) en gobernar durante tres mandatos consecutivos.
Después de casi seis semanas de campaña, todo apunta a que el recuento del día 4 de junio volverá a darle el Gobierno a los conservadores de la coalición Alianza Nacional Demócrata (NDA), liderada por el partido de Modi, Bharatiya Janata (BJ).
Este último día de votación, los sondeos indios volvieron a ofrecer unas estimaciones de cómo quedaría BJ en número de escaños en la Lok Sabha. Las encuestas más a favor del partido en el Gobierno le dan entre 392 y 362 representantes en el Parlamento, muy por encima de los 272 necesarios para obtener la mayoría absoluta. Con estas cifras, el control de Modi y su partido sobre la política nacional es hegemónico.
"Puedo decir con confianza que el pueblo de la India ha votado en cifras récord para reelegir al gobierno de la NDA. Han visto nuestra trayectoria y el modo en que nuestro trabajo ha supuesto un cambio cualitativo en la vida de los pobres, marginados y oprimidos", escribió en la red social X el primer ministro Modi.
Muy por detrás del conservador hindú, Mallikarjun Kharge, líder del Congreso Nacional Indio (INC), obtendrá unos resultados peores que en 2019, cuando cosechó lo necesario para 51 escaños en el Parlamento. Según la campaña avanzó, la brecha entre las dos formaciones políticas se fue agrandando para beneficio de los conservadores indios. De hecho, en los sondeos al 19 de abril, el comienzo de las votaciones, se ponía en duda la mayoría absoluta de Modi, lo que tal vez hizo más violenta su dialéctica electoral.
La islamofobia, punta de lanza del discurso de Modi
La retórica en contra de los musulmanes ganó importancia durante la campaña y se hizo muy presente en sus discursos públicos. En unas declaraciones previas a la tercera fase, Narendra Modi llamó a los musulmanes presentes en india "infiltrados" y aseguró que "tienen demasiados hijos".
La India es un país multicultural que tras su independencia del Reino Unido pasó por un cisma que separó la parte norte de la colonia británica, poblada mayormente por musulmanes, para formar lo que hoy día es Pakistán. Desde entonces las tensiones religiosas son el día a día en el país más poblado del mundo. El primer ministro Modi parece decidido a hacer recurso de este odio para propulsarse en las elecciones.
Aseguró que los musulmanes tienen el objetivo de convertirse en una mayoría en la India. Sin embargo, los seguidores del Corán son tan solo un 14% de la población total. En el mismo discurso en el que llamó a limitar el número de hijos por familia musulmana, acusó a su rival Mallikarjun Kharge de planear una redistribución de la riqueza en favor de los musulmanes.