La OTAN cumple 75 años con los ojos puestos en Moscú

"Más grande, más fuerte y más unida que nunca". Aquel es, a 75 años de su fundación, el estado de situación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) según su secretario general, Jens Stoltenberg.

La alianza militar y política se formó el 4 de abril de 1949, cuando Estados Unidos, Canadá y una decena de naciones europeas se congregaron en Washington para firmar un tratado de defensa mutua contra la amenaza soviética. Moscú respondería luego con una alianza propia: el Pacto de Varsovia, disuelto poco antes de la caída de la Unión Soviética.

De 12 miembros fundadores, la OTAN creció a 32. Prueba, según Stoltenberg, de que "debemos estar haciendo algo bien". Las últimas incorporaciones fueron motivadas y aceleradas por la invasión rusa de Ucrania. Finlandia y Suecia, una limítrofe y la otra cercana al territorio ruso, pidieron ondear sus banderas en la sede central de la organización en Bruselas, después de que las tropas rusas pisaran territorio ucraniano. En los últimos dos años se cumplieron ambas peticiones. Si Stoltenberg considera esto último una medida de éxito, lo contrario podría decirse de Vladimir Putin: una de las razones esgrimidas por el presidente ruso para atacar Ucrania fue que se sentía amenazado por la extensión de la OTAN.

A pesar de los pedidos desde Kiev, Ucrania, de momento, tendrá que esperar para convertirse en el miembro número 33 del club. Lejano, también, parece el envío de tropas extranjeras. La discusión de los aliados se centra en cómo proveer de recursos militares a las fuerzas ucranianas. En ese sentido, Stoltenberg se encuentra impulsando la creación de un fondo de cerca de 108.000 millones de dólares en los próximos cinco años para apoyar la guerra contra Rusia, de acuerdo con AFP. Además, quiere que la organización se involucre de manera directa en la entrega de los equipos a los soldados defensores, con la intención de acelerar el proceso de entrega.

Palabras para Estados Unidos

"No creo en Estados Unidos en solitario, de la misma forma en que no creo en una Europa en solitario", dijo Stoltenberg durante la celebración del aniversario, en la que participaron ministros de Relaciones Exteriores de los países integrantes. "A través de la OTAN, Estados Unidos tiene más amigos y más aliados que cualquier otro gran poder en el mundo".

"El reparto equitativo de la carga es esencial", dijo también el político noruego. "Europa está invirtiendo más, mucho más". Aquel fue uno de los reclamos de Donald Trump durante su presidencia: que los aliados europeos aumentasen su inversión militar, para que el peso de la defensa no cayese desproporcionadamente en Estados Unidos.

El mes pasado, Trump, que avanza a paso seguro hacia la nominación republicana, volvió a insistir en aquel punto: "Estados Unidos debería pagar su parte justa, no la parte justa de todos los demás". El país permanecerá en la mesa siempre y cuando, aseguró, los países europeos "jueguen limpio".

"Este año, la mayoría de los aliados gastará al menos un 2% de su Producto Interno Bruto en defensa", aseguró Stoltenberg durante su alocución este jueves. En 2014, sólo tres países alcanzaban aquel nivel de gasto, de acuerdo con AFP.

Preguntas sobre el futuro

Durante las reuniones que se celebrarán alrededor del festejo, los emisarios esperan avanzar en un asunto clave para el futuro de la organización: quién será el próximo secretario general.

Stoltenberg, que extendió cuatro veces su mandato original de cuatro años, deberá dejar el cargo el 1 de octubre. Varios líderes internacionales, sobre todo europeos, han declarado interés en el cargo. Todos los secretarios hasta la fecha provenían de países de Europa occidental, de acuerdo con el Wall Street Journal. Los países centrales del continente estarían buscando promover a uno de los propios.

Aunque habría tiempo hasta septiembre para nombrar un sucesor, los integrantes estarían apurando la discusión para resolver la designación antes de las elecciones al Parlamento Europeo en junio.