"Irish Lives Matter": disturbios en las calles de Dublín tras un nuevo apuñalamiento múltiple de niños

Los ciudadanos de Dublín (Irlanda) dijeron basta y salieron en masa a las calles para exigir seguridad tras el ataque con cuchillo ante una escuela que dejó tres niños heridos. Cientos de manifestantes se enfrentaron en la noche del jueves con la policía, quemaron vehículos y destrozaron mobiliario urbano en las calles de la capital irlandesa. La policía irlandesa informó el viernes de que había realizado 34 detenciones.

"Irish Lives Matter"

Según las autoridades irlandesas, el ataque en el que al menos cinco personas -tres niños y dos adultos- resultaron heridas, entre ellas y de gravedad una niña de cinco años y una mujer joven, no tuvo un móvil "terrorista". Tras el ataque, decenas de dublineses salieron a la calle a exigir seguridad para sus hijos. Los medios de comunicación europeos y las autoridades irlandesas no tardaron en calificar a los manifestantes como "ultras locos movidos por la extrema derecha", tal y como los llamó el comisario Drew Harris, que añadió que la "desinformación" sobre la nacionalidad del atacante había llevado a estos disturbios.

Sin embargo, los acontecimientos de Dublín son un ejemplo más del hartazgo de la población ante la violencia y las agresiones en sus barrios, otrora pacíficos. De hecho, después del ataque, cientos de participantes se concentraron en un barrio con numerosa población inmigrante con banderas nacionales y pancartas que rezaban "Irish Lives Matter" (Las vidas de los irlandeses importan).

Condena de las autoridades a los manifestantes

Mientras los manifestantes piden seguridad, las autoridades insisten en señalarlos por salir a las calles en actitud violenta. "No toleraremos que un pequeño número de personas utilicen unos hechos atroces para sembrar la división", declaró en un comunicado la ministra de Justicia, Helen McEntee, quien añadió que los ataques contra la policía serán tratados "severamente". La policía también señaló a los manifestantes por su actitud violenta.

Mientras tanto, las autoridades continúan sin revelar la nacionalidad ni el origen del atacante después de que en algunos medios de comunicación y redes sociales se informara de su posible origen argelino. El comisario Liam Geraghty señaló que el detenido por el ataque, un varón de unos 50 años, era una "persona de interés" para la policía. En este sentido, irlandeses de alcance internacional como el del luchador Conor McGregor no dudaron en denunciar que "Irlanda está en guerra" y criticar la actuación de las autoridades contra los ciudadanos que se manifestaban.

El héroe que detuvo el ataque: un inmigrante brasileño

En medio de la violencia, la historia de un ciudadano -hasta ayer- anónimo que gracias a su valentía impidió que el ataque contra los niños fuera mortal. Se trata del conductor de Deliveroo Caio Benicio, que estaba repartiendo en su motocicleta cuando presenció el ataque con el cuchillo. Benicio, de 43 años, se bajó de la moto y golpeó con el casco al agresor.

"Ni siquiera tomé una decisión, fue puro instinto, y todo acabó en segundos. Cayó al suelo, no vi dónde iba el cuchillo, y otras personas intervinieron", declaró este inmigrante brasileño al medio The Journal.