El Senado tumba una ley para identificar a los donantes de las campañas políticas

Sus impulsores, los senadores demócratas argumentaban luchar contra el dinero negro. El Partido Republicano denuncia un ataque a la Primera Enmienda.

La Administración demócrata sufrió el jueves un varapalo en el Senado al no conseguir aprobar una ley que pretendía obligar a hacer pública la identidad de cualquier persona que done a una entidad -excepto a un sindicato- más de 10.000 dólares. Lo que el Partido Demócrata consideraba una lucha contra el dinero negro era todo un ataque a la libertad de expresión en opinión del Partido Republicano. Finalmente, el  empate a 49 votos hizo que la norma no salga adelante.

En realidad, no se trata de algo nuevo. Se trata de una vieja aspiración del Partido Demócrata que lleva 10 años tratando de aprobar esta medida. En esta ocasión, el promotor ha sido Sheldon Whitehouse, que lamentó el resultado final:

Hoy, los republicanos del Senado se han puesto al lado de sus megadonantes y de los intereses especiales para proteger la fuerza más corrupta de la política estadounidense: el dinero negro, pero la lucha para aprobar este proyecto de ley no ha terminado".

"Demasiado dinero que fluye en la sombra"

El propio Joe Biden pidió esta semana que la norma fuera aprobada. "Hay demasiado dinero que fluye en la sombra para influir en nuestras elecciones", señaló el presidente. "En última instancia, esto se reduce a la confianza pública. El dinero oscuro erosiona la confianza pública".

Un discurso contundente que, sin embargo, no era igual para todos. Por ejemplo, las donaciones a los sindicatos superiores al importe indicado (10.000 dólares) continuarían siendo totalmente privadas.

Un "insulto a la Primera Enmienda"

Frente a estos argumentos, el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, criticó el proyecto de ley como "un insulto a la Primera Enmienda" y advirtió de que equivaldría a una toma de control partidista de las elecciones por parte de los demócratas.

Ya en marzo, con el intento demócrata de aprobar los contenidos de esta norma dentro de la llamada 'Ley del Pueblo',  McConnell denunció que "pisotea la privacidad de los ciudadanos con nuevos mandatos que intensificarían la 'cultura de la cancelación' y ayudarían a las turbas a acosar a la gente por sus opiniones privadas".

Riesgo de acoso y represalias

También comparten esta idea asociaciones sin ánimo de lucro como Americanos por la Reforma de Impuestos, que, en un duro comunicado, celebró la derrota demócrata:

"El proyecto de ley obligaría a los donantes de una organización (...) a aparecer en una comunicación política y obligaría a los grupos a revelar los miembros de su organización que no son necesariamente los que financian las campañas. Esto tendría la consecuencia prevista de exponer a los individuos a un mayor acoso y represalias por parte de los oponentes políticos.