El juicio del expresidente Donald Trump en Manhattan, en el caso del dinero oculto supuestamente pagado a la actriz Stormy Daniels a cambio de silencio, fue retrasado por 30 días por el juez Juan Merchan, quien programó este viernes una audiencia el 25 de marzo para abordar preguntas sobre un nuevo y repentino volcado de pruebas del Departamento de Justicia.
El retraso del juicio llega después de que los federales presentaran miles de páginas con pruebas del antiguo caso federal que involucró al exabogado de Trump, Michael Cohen.
Según Merchan, la postergación es necesaria para dar tiempo a los abogados defensores de revisar la gran cantidad de pruebas obtenidas y presentadas a última hora.
Previo a la determinación de Merchan, el Departamento de Justicia notificó al equipo legal de Trump y a la oficina del fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, que planeaba presentar 15,000 registros de potenciales pruebas.
Este mismo asunto, relacionado al supuesto pago a Daniels a cambio de silencio, ya había sido investigado por el DOJ mientras Trump era presidente.
De acuerdo con Fox News, la Fiscalía, encabezada por Bragg, “dijo que gran parte del material no está relacionado con el caso estatal contra Trump”.
“Los fiscales federales ya han proporcionado al menos 104.000 páginas de registros, 74.000 de los cuales inicialmente fueron sólo a la oficina de Bragg y no a los abogados de Trump”, reportó Fox News.
Posteriormente, la oficina de Bragg entregó las 74,000 páginas a la defensa.
Sin embargo, la defensa pidió un aplazamiento de 90 días o la desestimación de los cargos contra Trump, argumentando que hubo violaciones en el “proceso de descubrimiento”, mediante el cual se da el intercambio de pruebas.
Pero la decisión de Merchan, finalmente, pareció favorecer a la Fiscalía, pues el propio Bragg había dicho que no se oponía al retraso de 30 días para que el equipo legal de Trump pudiera revisar las pruebas.
La defensa de Trump dijo que el tiempo de retraso es insuficiente.
El fiscal Bragg, en total, acusó a Trump de 34 delitos graves por la presunta falsificación de registros comerciales derivados de los presuntos pagos de dinero oculto entregado a la actriz porno Daniels durante la campaña presidencial de 2016.
El caso se centra en las acusaciones de que el expresidente, presuntamente, falsificó registros comerciales de su empresa para ocultar el motivo real del por qué Cohen pagó a Daniels 130,000 dólares en 2016.
Según la acusación, el pago se realizó para tapar un encuentro sexual extramatrimonial entre Trump y Daniels años atrás para evitar un escándalo político durante la campaña.
El expresidente negó todas las acusaciones, incluyendo el encuentro sexual con Daniels. También se declaró inocente de todos los cargos.
