El caso contra el expresidente Trump en Georgia está por ahora en el limbo debido a las acusaciones de mala conducta en contra de la fiscal Fani Willis. Tanto ella como el fiscal Nathan Wade, que está bajo su mando y con quien tuvo una relación amorosa mientras llevaban el caso, podrían ser destituidos. Este jueves se llevó a cabo la tensa audiencia en la que los dos involucrados testificaron durante horas.
La fiscal del distrito del condado de Fulton, Fani Willis, acusó al expresidente Donald Trump y a 18 personas más de conspirar para revertir los resultados de las elecciones del 2020 en el estado de Georgia. Pero el caso tomó un rumbo inesperado cuando a inicios de este año Michael Roman, uno de los coacusados, presentó una moción para desestimar sus cargos y sacar a Willis del caso, alegando que ella se benefició personalmente de una relación con Nathan Wade, uno de sus principales fiscales.
La fiscal Fani Willis admitió el viernes pasado que sí tuvo una relación personal con el fiscal especial Wade, al que ella contrató para el caso penal electoral contra el expresidente Trump, pero aseguró el caso no se vio perjudicado por esa relación. Los dos asuntos fundamentales en la audiencia son: en qué momento empezó la relación y si la fiscal Willis se benefició del salario que recibía Wade.
Willis ha argumentado que quienes la acusan no han ofrecido hasta ahora “ningún respaldo para su insistencia en que el ejercicio de cualquier discreción procesal (es decir, cualquier decisión de acusación o recomendación de declaración de culpabilidad) en este caso era afectado por cualquier relación personal”.
Sobre la relación entre Willis y Wade, el expresidente Trump ha dicho: “Al perseguir a la persona de más alto nivel, y al candidato republicano, pudo conseguirle a su "amante" mucho más dinero, casi un millón de dólares, del que podría conseguir por el procesamiento de cualquier otra persona o individuo... ¡Eso significa que esta estafa está totalmente desacreditada y se acabó!"
¿Cuando empezó la relación?
El juez del caso deberá establecer cuando empezó la relación de los dos fiscales y si el señor Wade habría sido contratado para el caso por haber tenido una relación sentimental con la fiscal Willis.
Nathan Wade afirmó en la audiencia que su relación empezó en el 2022, meses después de que fuera contratado en el caso contra Trump el primero de noviembre del 2021. La fiscal Willis, confirmó esa afirmación, asegurando que no tuvo una relación romántica con su empleado sino hasta inicios del 2022.
Sin embargo, en uno de los testimonios más importantes de la audiencia, Robin Yeartie, una antigua amiga cercana de la fiscal Willis, dijo que la relación entre los dos fiscales empezó en el 2019, antes de que él fuera contratado.
Yeartie afirmó que se retiró de la oficina de la fiscal de distrito del condado de Fulton tras una “situación” en la que le dijeron que si no renunciaba sería despedida. Afirmó que tal situación puso fin a su amistad de años con la fiscal Willis, y que hasta la última vez que se comunicó con ella, en marzo del 2022, la fiscal seguía en una relación con Wade.
La afirmación de Yeartie probablemente terminaría en descalificación tanto para Willis como para Wade, por haber mentido en un affidavit. Corresponderá al juez determinar si pide más pruebas al respecto o es suficiente con el testimonio juramentado de la testigo.
Willis y Wade afirman que la fiscal le devolvía el dinero de los viajes en efectivo
Michael Roman ha asegurado que la fiscal Willis pagó de más a Wade por su puesto como fiscal especial, y que fueron a vacaciones de lujo pagadas con el sueldo de Wade. La pareja aseguró que dividieron los gastos en partes iguales. Sin embargo, cuando le preguntaron a Wade si él pagó por los viajes que tuvo con la fiscal Willis, afirmó que si bien los reservó con su tarjeta, ella le devolvió el dinero en efectivo. Afirmó que también pagó por los hoteles con su tarjeta y Willis le devolvió su parte en efectivo.
Cuando le preguntaron si tenía recibos o pruebas de que había depositado ese dinero en efectivo en algunas de sus cuentas, Wade afirmó que nunca depositó el efectivo, que lo mantenía en su bolsillo y luego lo utilizaba. El abogado redobló las preguntas, cuestionando si Wade mantenía en efectivo los miles de dólares que le habría pagado Willis a cambio de los viajes y el fiscal insistió en que nunca hizo una consignación y por eso no tiene un solo depósito en su cuenta para probar el asunto. Wade también reconoció que en ninguna parte del affidavit aclaró que la fiscal Willis le devolvía el dinero en efectivo.
Cuando le preguntaron a Wade si era cierto que en su contrato con el condado de Fulton había ganado más de 300.000 dólares durante el 2022, el fiscal respondió que su firma recibía esa cantidad, pero que el dinero se dividía luego entre tres personas, él y sus dos socios, por lo que asegura que no recibió los 300.000, sino solo una parte. El fiscal Wade también reconoció que sus dos socios tuvieron contratos con el condado, y que ese dinero también se compartía y que por lo tanto también recibió una parte del pago de los contratos de sus socios con el condado.
La fiscal Willis también aseguró que pagaba de vuelta a Wade en efectivo. Al preguntarle si sacaba ese dinero de un cajero para dárselo a su empleado, dijo que no. Las preguntas continuaron, intentando ir al origen del dinero en efectivo que la fiscal afirma que usaba para pagar los viajes que realizó con el fiscal Wade, pero Willis no pudo establecer de dónde sacaba el efectivo. Aseguró que su padre siempre le aconsejó tener dinero en efectivo en su casa al menos para seis meses, pero no pudo responder cuándo, ni de dónde consiguió el dinero en efectivo que afirmó que mantenía en su casa y con el que le pagaba a su pareja.
