Este jueves, un jurado de Michigan emitió un veredicto de culpabilidad contra James Crumbley por cuatro cargos de homicidio involuntario, relacionados con el tiroteo perpetrado por su hijo, Ethan Crumbley, en la escuela secundaria de Oxford en noviembre de 2021.
El jurado emitió su decisión tras escuchar a 15 testigos del trágico tiroteo, que resultó en la muerte de cuatro estudiantes y dejó a otras siete personas heridas.
La fiscalía argumentó que James Crumbley pudo evitar el tiroteo la mañana del 30 de noviembre de 2021 cuando llegó a la escuela para reunirse con los consejeros escolares después de que Ethan fuera sorprendido garabateando notas perturbadoras en clase con frases como “sangre por todas partes” y “mi vida es inútil”. También se destacó que James le compró a Ethan una pistola Sig Sauer de 9 mm como regalo, un día después del Día de Acción de Gracias, en un momento en que su hijo estaba emocionalmente afectado por la mudanza de su mejor amigo.
"Estos fueron hechos atroces en este caso. Estos padres podrían haber evitado esta tragedia. Era previsible", expresó la fiscal del condado de Oakland, Karen McDonald, tras el veredicto.
James Crumbley, de 47 años, ahora enfrenta una sentencia de hasta 15 años de prisión por los cuatro cargos de homicidio involuntario, que representan a los cuatro estudiantes asesinados por su hijo.
El caso ha sido seguido de cerca en todo el país y ha generado un debate sobre la responsabilidad de los padres en los tiroteos escolares y el almacenamiento seguro de armas.
"Este es un caso histórico porque los fiscales están tratando de responsabilizar a un padre por las acciones de un niño (...) las acciones violentas que condujeron a la muerte de otros niños. Y por lo tanto este es un caso de prueba para ver los límites de la responsabilidad de los padres por las acciones de sus hijos que están en edad de escuela secundaria”, explicó el abogado defensor penal, Keith Johnson, a Fox News Digital.
James Crumbley, junto con Jennifer Crumbley, se convirtieron en los primeros padres en la historia de Estados Unidos en ser juzgados por un tiroteo masivo provocado por su hijo en una escuela.
Es importante recordar que Jennifer, la madre de Ethan, también fue declarada culpable de cuatro cargos de homicidio involuntario, después de que la fiscalía argumentara que pudo haber evitado el tiroteo si hubiera prestado atención a las señales de alerta de su hijo Ethan.
Por su parte, Ethan Crumbley, quien tenía 15 años en el momento del tiroteo, se declaró culpable de asesinato y terrorismo el año pasado y cumple cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
