"El fracasado Secretario de Defensa Lloyd Austin debería ser despedido inmediatamente por conducta profesional impropia y abandono del deber". La frase, por supuesto, es de Donald Trump. No obstante, cada vez son más las voces que se unen a la del expresidente pidiendo la destitución de Austin tras salir a la luz que ni siquiera el presidente Biden estaba al tanto del ingreso hospitalario del responsable de los ejércitos nacionales. El secretismo llegó al extremo de que la vicesecretaria, Kathleen Hicks, que se encontraba de vacaciones en Puerto Rico, tuvo que tomar las riendas del Departamento sin saber por qué. No obstante, Biden reiteró su confianza en él tras una conversación telefónica.
El secretario de Defensa reconoce que "podría haber hecho un mejor trabajo"
El propio Austin reconoció a través de un comunicado que debió gestionar mejor la comunicación de su ingreso, y asumió toda la responsabilidad de la decisión de ocultarlo incluso al presidente de la Administración.
Comprendo la preocupación de los medios de comunicación por la transparencia y reconozco que podría haber hecho un mejor trabajo asegurándome de que el público estuviera debidamente informado. Me comprometo a hacerlo mejor. Pero es importante decirlo: se trataba de mi procedimiento médico y asumo toda la responsabilidad de mis decisiones sobre la divulgación.
Según The New York Times, dos funcionarios, que hablaron bajo la condición de anonimato, confirmaron que Biden y Austin "hablaron por teléfono el sábado por la noche". Según estas fuentes, "el presidente se alegró de saber que el Sr. Austin se está recuperando y tiene plena confianza en su secretario de Defensa".
Un "escandaloso fallo"
No todo el mundo es igual de comprensivo. Y no sólo Trump. El senador republicano Tom Cotton, miembro del comité de las Fuerzas Armadas, emitió un comunicado en el que exigía "consecuencias para este escandaloso fallo". El conservador destacó que Austin estuvo fuera de su puesto durante días "cuando las decisiones más importantes deben tomarse en cuestión de minutos" y él es "el eslabón clave en la cadena de mando entre el presidente y los militares uniformados".
El Secretario Austin debe abordar con prontitud el preocupante informe de que el Departamento de Defensa no notificó inmediatamente al Presidente Biden o al Consejo de Seguridad Nacional que estaba hospitalizado e incapacitado para desempeñar sus funciones. El Secretario de Defensa es el eslabón clave en la cadena de mando entre el presidente y los militares uniformados, incluida la cadena de mando nuclear, cuando las decisiones más importantes deben tomarse en cuestión de minutos. Si este informe es cierto, tiene que haber consecuencias para este escandaloso fallo.
My statement following reports that the @DeptofDefense failed to disclose that Secretary Austin was hospitalized: pic.twitter.com/YjL4jSZURI
— Tom Cotton (@SenTomCotton) January 6, 2024
Un secretario de Defensa "no tiene derecho a la intimidad en esta situación"
La Asociación de la Prensa del Pentágono, que reúne a los periodistas que cubren la información de Defensa, emitió un comunicado criticando la situación y subrayando que "como máximo responsable de defensa de la nación, el secretario Austin no tiene derecho a la intimidad en esta situación".
The Pentagon Press Association has written a letter to the public affairs heads of the Pentagon, expressing outrage about this manner in which this was released to the public and the press. pic.twitter.com/aPZnBhlBHh
— Oren Liebermann (@OrenCNN) January 6, 2024
