Amazon files: la compañía accedió a censurar libros críticos con las vacunas tras "sentir la presión de la Casa Blanca"

El presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, publicó los correos entre la empresa y miembros de la Administración Biden reclamando la retirada u ocultación de estas publicaciones.

El presidente de la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, denunció a través de su cuenta de X que la Administración Biden coaccionó a Amazon para retirar o reducir la visibilidad de libros contrarios a las vacunas. Jordan sacó a la luz varios correos como prueba en los que se puede comprobar que el gigante del comercio electrónico cedió tras "sentir la presión de la Casa Blanca".

Andy Slavitt, persona clave en la censura de la Casa Blanca durante la pandemia

En los correos, que salieron a la luz por que el comité presidido por Jordan los reclamó en su investigación sobre la censura de la Administración Biden durante la pandemia del covid, se observa que Andy Slavitt -el trabajador de la Casa Blanca que ordenó a Facebook censurar un meme e información real que chocaba con el discurso oficial- fue el responsable directo de las presiones. Según la información facilitada por el legislador, Slavitt comenzó su campaña el 2 de marzo de 2021 reclamando a la compañía que le pusiera en contacto con quien correspondiera para hablar sobre "los altos niveles de propaganda y desinformación de [sic] Amazon".

Miedo a quedar expuestos ante el público y los medios conservadores

El sistema para pedir la censura de los libros era, de acuerdo con alguno de los correos hechos público, introducir la palabra "vacuna" en el buscador de Amazon y ver los resultados que aparecían. En alguno de los mensajes Slavitt llega a decir que los resultados de este simple proceso le habían resultado "preocupantes". En otra ocasión, lamentó que una de las publicaciones no incluyera una advertencia de la CDC sobre su contenido.

Jordan denunció además que los empleados de Amazon optaron por evitar una censura "manual" por miedo a ser "demasiado visibles" ante el público estadounidense y ser descubiertos por los medios de comunicación conservadores, con el escándalo que esto supondría.

"Libros prohibidos o enterrados" en las búsquedas

En un momento dado, la compañía defendió que, como empresa de ventas al por menor, sus clientes "son diferentes" a los usuarios de las redes sociales. Precisamente por esa naturaleza de minoristas, "proporcionamos a nuestros clientes acceso a una variedad de puntos de vista, incluidos algunos libros que algunos clientes pueden considerar objetables". Algo que no pareció gustar al entorno de Biden, tal y como se les transmitió a los representantes de la empresa en la Casa Blanca en una conversación presencial en el complejo presidencial en la que una de las cuestiones clave era si el Ejecutivo "quería libros prohibidos o simplemente enterrados en lo más profundo de los resultados de búsqueda".

Amazón cede

En los correos, el personal de Amazon señala que aceptó el encuentro porque estaban "sintiendo la presión de la Casa Blanca". Esta misma presión hizo "a partir del 9 de marzo -el mismo día de su reunión con la Casa Blanca- Amazon habilitó la opción "No promocionar" para los libros que expresaban la opinión de que las vacunas no eran eficaces", además de comprometerse a buscar otras maneras para "reducir la visibilidad de ciertos libros que no gustaban a la Casa Blanca de Biden".