España cumple ocho días con las calles abarrotadas de decenas de miles de manifestantes que rechazan al Gobierno socialista de Pedro Sánchez y que repudian la posibilidad de que se forme un nuevo Gobierno, liderado por el propio Sánchez, y sostenido por partidos políticos que hace unos años protagonizaron un golpe de Estado separatista.
Lo primero que se debe tener en cuenta para entender la situación de España es que ninguno de los candidatos de las elecciones generales logró los votos necesarios para formar Gobierno. En las elecciones generales no se elige directamente al presidente, sino a un Parlamento. Y son sus miembros los que votan la formación de un Ejecutivo. Por ello, se requiere un voto favorable de una mayoría absoluta de 176 de los 350 diputados para ser investido presidente en un primer intento, o mayoría simple, es decir más sí que no, en un segundo.
A pesar de que el Partido Popular (derecha) ganó las elecciones al ser el más votado y obtener 137 diputados, no logró la investidura de su candidato, Alberto Núñez Feijóo, ni en primera ni en segunda votación.
Por ello, Sánchez (líder del PSOE), que cuenta con 122 diputados, está intentando formar Gobierno. El socialista pretende repetir el llamado “bloque progresista”, un grupo formado por los partidos de izquierda, nacionalistas e independentistas que facilitaron su llegada al poder en 2020. Para eso, necesitaba el apoyo de Junts per Catalunya -uno de los principales partidos independentistas de España-. Y lo consiguió con el acuerdo que genera rechazo en la sociedad española.
Pero, ¿porqué es tan importante el acuerdo?
Una de las cosas más importantes del acuerdo es que se establecería una ley de amnistía. Según la Real Academia Española, una amnistía es el perdón que los poderes públicos conceden a la comisión de un delito y a la posible pena aparejada.
En ese sentido, los partidos Junts per Catalunya (JxCat) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) le han pedido a Sánchez que, a cambio de su investidura, se apruebe una ley de amnistía que beneficie a todos aquellos que han sido objetos de causas penales, civiles y administrativas por promover un proceso de independencia en Cataluña a lo largo de la última década.
¿Junts y ERC necesitan una amnistía?
Sí. Y es que el partido independentista catalán Junts per Catalunya, cuyo líder es Carles Puigdemont, impulsó -en octubre del 2017- un referéndum ilegal, catalogado como golpe de Estado, para imponer la independencia unilateral de la comunidad de Cataluña.
Por ese golpe de Estado, los líderes independentista fueron enjuiciados, por golpistas, y hoy se encuentran en el exilio. Para formar Gobierno y hacer presidente a Pedro Sánchez, Junts exige una serie de condiciones, entre las que está la amnistía a todos los golpistas.
¿Cuál es el motivo por el que se registran las protestas?
La sociedad civil considera que el acuerdo en el que se establece una amnistía sería una violación al Estado de derecho español. Es algo que también ha sido advertido por organizaciones como la Asociación de jueces y el Consejo General del Poder Judicial, que consideran que el beneficio estaría fuera de la ley. Es por eso que los ciudadanos han tomado las calles para manifestarse en contra del acuerdo.
"Utilizar la promulgación de una ley singular para invadir competencias propias del Poder Judicial como medio de negociación política, constituye una perversión del régimen constitucional, porque nada impediría que mayorías coyunturales en la composición de las Cortes impongan su criterio por encima de las exigencias constitucionales, al amparo de que una norma con ese rango no puede ser cuestionada por los ciudadanos", dijo el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en una declaración institucional aprobada este lunes en un Pleno extraordinario y difundida por El Mundo.
Las reacciones de la oposición
Santiago Abascal, líder del partido de derecha Vox y diputado del Congreso, respaldó el llamado a manifestación a las afueras del PSOE. Además, Abascal sostuvo que tomará medidas legales en contra de Fernando Grande-Marlaska por la acción de control ejercida por la Policía. También aseguró que la derecha debe mantenerse manifestando en contra de la amnistía y pidió al Partido Popular (líder de la oposición) hacer convocatorias para que los ciudadanos ejerzan su derecho a la protesta.
"Cuando el pueblo español protesta legal y pacíficamente, ese mismo político, ese aprendiz de tirano, ordena a la policía emprenderla a porrazos y con gases lacrimógenos contra el pueblo", dijo Abascal en unas declaraciones recogidas por El Debate.
Abascal también cuestionó que haya privilegios para los delincuentes a cambio de ser presidente del Gobierno y por el contrario resaltó que hay "porras y gases lacrimógenos para los ciudadanos que solo exigen que la ley sea igual para todos".
Mientras, en el Partido Popular son más prudentes. Se desmarcaron de las manifestaciones de los últimos días, pero convocaron a nuevas protestas para el fin de semana:
Vamos a liderar la contestación social e institucional a la rendición de nuestro país con la misma estrategia que ha sacado a la calle a decenas de miles de personas en convocatorias organizadas por el Partido Popular.
