20 fiscales generales condenan el informe del FBI que vincula catolicismo con extremismo

Los procuradores aseguraron que la agencia federal estaba "tratando a los católicos como terroristas potenciales debido a sus creencias".

Veinte fiscales generales condenaron el informe realizado por el FBI en el que relacionaba catolicismo con extremismo violento. 

Los fiscales de Alabama, Alaska, Arkansas, Georgia, Idaho, Indiana, Iowa, Kansas, Louisiana, Kentucky, Missouri, Montana, Nebraska, Ohio, Carolina del Sur, Tennessee, Texas, Utah  y Virginia Occidental decidieron enviar una carta de 7 páginas al fiscal general de Estados Unidos, Merrick B. Garland y al director del FBI, Christopher Wray en el que protestaron por la existencia de ese informe:

Letter to Attorney General Garland Director Wray (2!10!2023) (002) by VozMedia on Scribd

El documento se centraba en los católicos tradicionales, especialmente en los católicos de Virginia. Sin embargo, según aseguraron los fiscales, al final el documento se refería a la religión y es algo que consideran inaceptable. Por eso, reclamaron a la agencia gubernamental que pusiesen medidas ante un posible ataque del personal de la agencia a ciudadanos por motivos religiosos:

El FBI debe ordenar de inmediato e inequívocamente al personal de la agencia que no atente contra los estadounidenses por sus creencias y prácticas religiosas. También exigimos que el FBI haga público todo el material relacionado con el memorando y su producción.

En la misiva, los procuradores incidían en que el informe iba en contra de uno de los derechos básicos sobre los que se fundó el país: la libertad de culto. Es más, aseguraban que "algunos de nuestros primeros Estados se fundaron como refugios seguros para los disidentes religiosos".

Por eso, explicaron, estaban muy en desacuerdo con el documento que UncoverDC había filtrado del FBI y acusaron a la Oficina Federal de estar "tratando a los católicos como terroristas potenciales debido a sus creencias".

Los obispos, también en contra del informe del FBI

No fueron los únicos. Una vez filtrado el documento de la agencia gubernamental, varios obispos manifestaron su posición en contra. Uno de ellos fue Timothy Dolan, cardenal de Nueva York y presidente de libertad religiosa del Consejo de Obispos Católicos de Estados Unidos. En declaraciones recogidas por Just the News, fue muy crítico con el informe publicado por el FBI:

Permítanme primero ser claro: cualquiera que defienda el racismo o promueva la violencia está rechazando la enseñanza católica sobre la dignidad inherente de todas y cada una de las personas.

Además, se mostró de acuerdo con las declaraciones que días antes había dado el obispo Barry Knestout de la Diócesis de Richmond. En su comunicado, el religioso afirmó estar muy preocupado por lo que se había publicado en el documento y agradeció a los 20 fiscales generales su apoyo al enviar la carta en la que criticaron la existencia del informe:

El documento filtrado debería ser preocupante y ofensivo para todas las comunidades de fe, así como para todos los estadounidenses. Estoy agradecido por el Fiscal General de Virginia y los otros 19 fiscales generales que han pedido al gobierno que divulgue públicamente todos los materiales relacionados con la producción de este memorándum. Si existe evidencia de extremismo, debe ser erradicada, pero no a expensas de la libertad religiosa. La preferencia por las formas tradicionales de culto y la adhesión estricta a las enseñanzas de la Iglesia sobre el matrimonio, la familia, la sexualidad humana y la dignidad de la persona humana no equivale al extremismo.