Los robotaxis aceleran entre polémica

Las compañías que ofrecen viajes con vehículos sin conductor se expanden mientras crecen las quejas de autoridades y servicios de emergencia.

El futuro del taxi acelera en EEUU. O no. A la vez que las compañías que proporcionan servicios de vehículos de conducción autónoma (conocidos popularmente como robotaxis) se establecen o hacen pruebas en más ciudades estadounidenses, crece la polémica sobre su impacto en el tráfico, especialmente en atascos, y el riesgo que suponen para los servicios de emergencia como policías, ambulancias o bomberos.

Tres compañías operando en cuatro ciudades en estos momentos

En estos momentos, tres compañías (Waymo, Cruise y Motional) ofrecen servicios de robotaxi, que pueden ser contratados en cuatro ciudades: San Francisco, Fénix, Austin y Las Vegas. Mientras que Waymo y Cruise (propiedad de General Motors), que han invertido decenas de miles de millones de dólares en desarrollar sus modelos, presentan planes muy agresivos de expansión para el futuro próximo, Motional, que ofrece sus automóviles en Las Vegas desde hace años, prepara un desembarco más prudente.

San Francisco y Fénix cuentan con vehículos de conducción autónoma de Waymo y Cruise. La filial de GM además opera en Austin, mientras que Waymo tiene todo a punto para llenar las carreteras del condado de Los Ángeles de sus automóviles. No obstante, se están desarrollando pruebas en otras 14 ciudades, especialmente en el Cinturón del Sol, puesto que el clima y la legislación son mucho más adecuados para esta tecnología en desarrollo. De hecho, ambas empresas esperan que sus modelos en prueba Seattle, San Diego, Miami, Nashville, Raleigh, Charlotte, Atlanta y Washington, D.C. Dallas y Houston puedan comenzar a ser comercializados a lo largo del año.

Los robotaxis, un quebradero de cabeza para las autoridades de San Francisco

El caso más mediático y paradigmático es San Francisco. En total, según The Washington Examiner, la flota de robotaxis supera los 600 autos en estos momentos en la ciudad. De acuerdo con la web de Waymo, entre San Francisco y Fénix, los ciudadanos contratan unos 10.000 viajes semanales sólo con esta compañía. No obstante, a pesar de que el estado de California ha dado luz verde al desarrollo de los programas de ambas empresas, las autoridades de la ciudad han reclamado que sea revocado debido a los problemas que estas flotas originan en el día a día de la ciudad.

Además de los atascos, la falta de reacción ante imprevistos -ciudadanos han compartido fotos de estos vehículos clavados en agujeros en el asfalto-, la principal queja proviene de los servicios de emergencias, que no han podido responder a situaciones urgentes por culpa de calles bloqueadas por autos sin conductor que no reaccionaban a las luces o sirenas.

Los bomberos de SF denuncian 39 incidentes en seis meses

Según denunció a finales de junio Jeanine Nicholson, jefa de los bomberos de San Francisco, en los seis primeros meses de 2023 se registraron 39 incidentes sólo de su departamento en el que estuvieron implicados robotaxis. Además, el pasado 18 de agosto un  vehículo autónomo de cruise colisionó con un camión de bomberos que se respondía a una emergencia y se saltó un semáforo advirtiéndolo mediante señales luminosas y acústicas.

Nicholson denunció que los políticos sólo están teniendo en cuenta el número de accidentes en los que se han visto envueltos estos vehículos, pero ignoran problemas de fluidez del tráfico, como bloqueos de calles o interferencias con emergencias. En el informe de los bomberos se incluyen incidentes en los que los camiones de bomberos debieron salir marcha atrás de calles de único sentido bloqueadas por autos sin conductor o incluso que uno de estos carros se detuvo encima de una manguera mientras trataban de apagar un incendio. Unas quejas a las que los policías se sumaron días después.

Cuando se produce una situación en la que uno de estos autos compromete la actuación de un vehículo de emergencia, los afectados deben ponerse en contacto con la central para que un operador mueva el coche de manera remota desde un ordenador. En ocasiones, un trabajador de la empresa debe trasladarse físicamente para mover el automóvil. En una de las ocasiones, los bomberos informaron de que uno de ellos se vio obligado a romper el cristal de una ventanilla y apartarlo personalmente.

Reducción del número de accidentes

Por contra, entre las ventajas que alegan los empresarios y los defensores de esta tecnología es que reducen el número de accidentes. Destacan que estos vehículos, que funcionan a gracias a la inteligencia artificial, unos mapas exhaustivos de la localidad por dónde circulan, y un sistema de cámaras y sensores, no se ven afectados por distracciones o el cansancio, ni conducen en estado de embriaguez o bajo los efectos de las drogas.