Donald Trump se metió de lleno en las ahora pausadas negociaciones por el techo de la deuda. Tras conocerse la noticia sobre los diálogos truncos entre demócratas y republicanos, el expresidente no tardó en comentar al respecto a través de su propia red social, Truth Social.
Tras la segunda reunión entre Joe Biden y Kevin McCarthy, las cosas venían mejorando y el optimismo hacia el 1 de junio era creciente. Eso se terminó el viernes 19 de mayo, cuando uno de los delegados del portavoz aseguró que era tiempo de hacer una pausa.
En este contexto, Trump tomó su teléfono y publicó lo siguiente: "Los republicanos no deberían llegar a un acuerdo sobre el techo de la deuda a menos que obtengan todo lo que quieren (Incluido el 'fregadero de la cocina'). Esa es la forma en que los demócratas siempre han tratado con nosotros. ¡¡¡No se dobleguen!!!".
Sus palabras van en línea con las del House Freedom Caucus, que recientemente expresó cierta hostilidad hacia las negociaciones entre el portavoz y la Casa Blanca. Según comentaron, no estarán conformes si el trato no devuelve los gastos a los niveles del año fiscal 2022, eleve el límite de la deuda solo para el próximo año y restrinja el crecimiento del gasto al 1 % en la próxima década.
En otras palabras, su intención es que la Ley de Límite, Ahorro y Crecimiento de 2023 sea aprobada así como está, algo que se antoja complicado con la mayoría demócrata en el Senado.
“La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha hecho su trabajo al Ley de Límite, Ahorro y Crecimiento de 2023 para proporcionar un mecanismo para elevar el techo de la deuda. Esta legislación es la posición oficial del House Freedom Caucus y, por su aprobación con 217 votos, de toda la Conferencia Republicana de la Cámara", indicaron en un comunicado compartido con The Daily Wire.
“El Freedom Caucus de la Cámara de Representantes pide al presidente McCarthy y a los republicanos del Senado que utilicen todos los medios y herramientas a su disposición para garantizar que se convierta en ley. No debe haber más discusión hasta que el Senado apruebe la legislación", sumaron.
“Hasta que la gente esté dispuesta a tener conversaciones razonables”
Uno de los emisarios más importantes del portavoz en las negociaciones es el congresista Garret Graves (R-LA). En los últimos días, ya con un tono más positivo, se encargó de encaminar el diálogo hacia un posible acuerdo con la Casa Blanca. La buena sintonía se cortó el viernes 19 de mayo, cuando el legislador anunció que planea “hacer una pausa”.
“Hemos decidido hacer una pausa, porque simplemente no es productivo”, aseguró en diálogo con la prensa luego de salir de una reunión en el Capitolio. “Hasta que la gente esté dispuesta a tener conversaciones razonables sobre cómo puede avanzar y hacer lo correcto, no nos vamos a sentar aquí y hablar con nosotros mismos”, sumó el congresista, que representa al sexto distrito electoral de Louisiana desde el 2015.
Sus palabras fueron reforzadas por un funcionario de la Casa Blanca, quien indicó que se había producido un enfriamiento en las últimas horas. “Hay diferencias reales entre las partes en temas de presupuesto y las conversaciones serán difíciles. El equipo del presidente está trabajando arduamente para lograr una solución bipartidista razonable que pueda ser aprobada por la Cámara y el Senado”, expresó.
