La representante demócrata radical Summer Lee gana las primarias de Pensilvania para revalidar su escaño

Trump y Biden cumplen el trámite sin apuros mientras que los 17 representantes del Estado en activo estarán en las papeletas de noviembre.

Con delegados suficientes para garantizar la nominación de sus respectivos partidos, Donald Trump y Joe Biden vivieron una noche sin sobresaltos en las primarias de Pensilvania. Con la designación presidencial decidida, todos los ojos estaban sobre la representante demócrata y miembro de The Squad Summer Lee, que consiguió una rotunda victoria en el distrito 12 y optará a revalidar su escaño en noviembre. En el bando republicano, Brian Fitzpatrick también tratará de mantener su asiento en la Cámara tras derrotar ampliamente a Mark Houck, mientras que el resto de carreras donde había más de un aspirante terminaron con resultados más ajustados.

Con las candidaturas a Presidencia y Senado decididas en ambos partidos, la determinación de los candidatos a la Cámara de Representantes era el principal punto de atención. Con los 17 representantes en activo tratando de defender su puesto el escaño de la congresista radical Summer Lee era uno de los platos fuertes, para ver si su postura anti-israelí podía pasarle factura. La miembro de The Squad revalidó con holgura (60,6%) su nominación frente a la moderada Bhavini Patel. También entre los demócratas, la ex presentadora  Janelle Stelson se impuso a otros cinco aspirantes y tratará de arrebatar el escaño al republicano Scott Perry en noviembre.

El escaño del Senado de Pensilvania, clave para la mayoría de la Cámara Alta en noviembre

Entre los republicanos, además de la contundente victoria de Fitzpatrick (61,4%) para revalidar su asiento, Ryan Mckenzie consiguió el 42,6% de los apoyos de los votantes conservadores del distrito 7 para tratar de robar el escaño a la demócrata Susan Wild, uno de los puestos en riesgo para el Partido Azul. Además del de Wild, el GOP considera que puede asaltar los distritos 8 (Matt Cartwright) y 17 (Chris Deluzio).

En la elección del candidato presidencial, Joe Biden consiguió el 93,1% de los votos, mientras que el representante Dean Phillips, a pesar de haberse retirado de la contienda y expresado su apoyo al actual líder del Ejecutivo reunió el 6,9%. Entre los conservadores, Nikky Haley, a pesar de no competir, arañó más de un 15% de los votos a Trump (83,5%), que tampoco pasó mayores apuros para seguir sumando delegados.

A pesar de que el escaño senatorial en liza para noviembre promete ser uno de los más disputados de esa jornada, no se decidía nada durante las primarias, puesto que ni el demócrata Bob Casey ni el republicano Dave McCormick tenían rival dentro de sus partidos. Casey, que tratará de conseguir su cuarto mandato, aventaja ligeramente a McCormick en las encuestas, por lo que es uno de los escaños que el GOP tiene marcados en rojo para tratar de revertir la mayoría en la Cámara Alta.