La nave espacial Odiseo despega con éxito hacia la Luna

Intuitive Machines pretende ser la primera compañía privada en alunizar. La misión IM-1 viaja a bordo de un cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX.

La nave espacial estadounidense Odiseo despegó este jueves del Centro Espacial Kennedy -Florida- con la misión de llegar a la Luna, en el segundo intento que hace una compañía privada este año tras un primer fracaso en enero.

La empresa Intuitive Machines, con sede en Texas y a cargo de la misión IM-1, espera convertirse en la primera entidad no gubernamental en realizar un alunizaje suave en el satélite natural de la Tierra y posar en su superficie el primer robot estadounidense desde las misiones Apolo, hace más de cinco décadas.

La nave lleva a bordo instrumental de la NASA y el objetivo principal de la misión es llevar instrumentos científicos y demostraciones tecnológicas al polo sur de la Luna, una región que permanece inexplorada.

Odiseo viaja a bordo de un cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX que despegó en la madrugada de este jueves desde el Complejo de Lanzamiento 39A del Centro Espacial Kennedy de la NASA, en el centro de Florida. El despegue se había aplazado la madrugada del miércoles debido a anomalías durante el proceso de carga de metano.

 

Una vez solucionado el problema, el módulo de alunizaje tiene un nuevo tipo de motor de metano líquido y oxígeno superenfriado que entrega la potencia para llegar a su destino rápidamente, evitando una larga exposición a la región de alta radiación que rodea la Tierra, conocida como el cinturón de Van Allen.

Pese al retraso, está previsto que la nave llegue el 22 de febrero a su lugar de alunizaje, Malapert A, un cráter de impacto situado a 300 kilómetros del polo sur lunar.

En enero, la compañía Astrobotic no pudo llegar a la Luna debido a una fuga de combustible y su módulo de aterrizaje debió ser destruido deliberadamente en pleno vuelo.

La NASA encargó a compañías privadas llevar equipos científicos al satélite natural con el fin de comprender mejor y mitigar los riesgos medioambientales para los astronautas.

La agencia espacial estadounidense espera establecer una presencia de largo plazo en la Luna y recoger hielo para obtener agua potable y combustible para cohetes en el marco de su programa Artemis.