La Corte Suprema escuchará en diciembre un importante caso fiscal que podría cambiar el código tributario tal y como lo conocemos

El máximo tribunal del país analizará en Moore vs. Estados Unidos si la Decimosexta Enmienda aplica para ganancias que todavía no llegaron a materializarse.

La Corte Suprema (SCOTUS) escuchará en diciembre los argumentos orales de Moore vs. Estados Unidos, un caso que podría resultar en una reestructuración del código tributario. En efecto, la opinión de los magistrados podría hacerle perder mucho dinero al Gobierno Federal, puesto que lo que está en juego es si este puede grabar ciertas ganancias catalogadas como  “no obtenidas”.

En concreto, los demandantes buscan impugnar la constitucionalidad de la Sección 965 del Código de Rentas Internas. Promulgada en la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos de 2017 (TCJA), "impone un impuesto de transición sobre las ganancias no distribuidas acumuladas por las Corporaciones Extranjeras Controladas (CFC) de EE. UU. entre 1986 y finales de 2017", según el Tax Policy Center.

El corazón de la demanda radica en la Decimosexta Enmienda, la cual reza que el Congreso tiene la potestad de "establecer y recaudar impuestos sobre la renta, cualquiera que sea su origen, sin prorrateo entre los diversos estados y sin tener en cuenta ningún censo o enumeración." De acuerdo con Moore, el impuesto que impone la Sección 965 es inconstitucional, dado que las ganancias no obtenidas que acumularon en una CFC no cumplen con la definición de ingreso bajo la mencionada enmienda.

En otras palabras, el fondo de la cuestión es si la Decimosexta Enmienda aplica para ganancias que todavía no llegaron a materializarse como tales. Si la Corte falla a favor de Moore, podría llevar a la anulación de otras partes del código tributario, provocando una reestructuración del mismo.

Del lado del Gobierno, sostienen que el mismo concepto de ganancias tiene que ver con la acumulación. Es decir, definen los ingresos anuales de modo que incluyan todos los aumentos en los valores de los activos que una persona posea, independientemente si este los convirtió efectivamente en ganancia al venderlos.

La legislación actual ampara el no tributo de los ingresos no obtenidos, por ejemplo en las ganancias de capital, las cuales suelen estar sujetas a impuestos sólo cuando se obtienen mediante venta u otra disposición. Sin embargo, también hay excepciones a esta regla.

Actualmente, el máximo tribunal del país cuenta con una mayoría conservadora de 6-3, con Clarence Thomas, Samuel Alito, John Roberts, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett en el primer grupo, mientras que Sonia Sotomayor, Elena Kagan y Ketanji Brown Jackson se encuentran en la minoría.

¿Qué pasaría si la Corte falla en favor de Moore?

De acuerdo con la Tax Foundation, "esto reduciría los ingresos en unos 346.000 millones de dólares en los próximos 10 años, incluida la devolución de los pagos de impuestos realizados entre 2018 y 2023 (véase la Tabla 1). Si se restableciera el aplazamiento de los beneficios domiciliados en el extranjero, prevemos que las empresas ajustarían su comportamiento. Sin embargo, nuestra estimación no tiene en cuenta este efecto, que podría amplificar aún más la pérdida de ingresos prevista a continuación".

"El caso Moore vs. Estados Unidos podría tener un impacto sustancial en la política fiscal y los ingresos de Estados Unidos. Podría invalidar algunas políticas fiscales actuales de Estados Unidos, y una sentencia amplia podría ir mucho más allá de la disposición impugnada por los demandantes. También podría proscribir posibles políticas fiscales futuras que el Congreso desee adoptar teniendo en cuenta la evolución de las normas fiscales internacionales. La magnitud del impacto depende del alcance de la sentencia del Tribunal", concluyeron.