Una nueva huelga se suma a los cada vez más parones que se están viviendo a lo largo de Estados Unidos. Esta vez son los trabajadores sanitarios quienes iniciaron este miércoles una protesta que durará 72 horas y en la que participarán cerca de 75.000 empleados en seis estados.
Fueron los trabajadores de Kaiser Permanente los que comenzaron esta huelga exigiendo mejores condiciones y beneficios tras la crisis sanitaria que provocó la pandemia y que, aseguran, ellos padecieron al tener que trabajar muchas más horas de las pactadas en sus contratos. Llevaban en negociaciones con el sindicato desde abril pero, finalmente, no lograron pactar nada y fruto de esto los empleados iniciaron las protestas. "Kaiser tiene un caótico estilo de negociación dirigido por su mala fe durante todo el proceso", declararon el lunes los líderes del sindicato United Healthcare Workers del Oeste.
¿Qué piden los empleados sanitarios para acabar con la huelga?
En concreto, explica Axios, los trabajadores exigen un aumento salarial del 27% en los próximos cuatro años. Junto con esto, exigen el aumento de los salarios mínimos a 23 dólares la hora en California y 21 dólares la hora en mercados fuera de California, la actualización del Plan de Rendimiento Compartido, la mejora de los beneficios de salud y los planes de ingresos de jubilación existentes y renovar los programas de asistencia y capacitación para la matrícula.
La huelga está convocada en 39 hospitales de California así como en otros centros sanitarios de Colorado, Oregón y Washington. En el estado de Virginia y en Washington, D.C., se han convocado piquetes pero sólo lo harán durante 24 horas.
Los médicos son los únicos trabajadores que no se unirán al parón. Sí lo harán las enfermeras vocacionales, los ecografistas, los terapeutas respiratorios, los técnicos del departamento de emergencias, las amas de llaves, los auxiliares sanitarios, el personal administrativo, los empleados de la cafetería y de limpieza, los optometristas y los laboratoristas.
Con este parón, el sindicato de los trabajadores sanitarios espera que la empresa acepte sus condiciones. De no hacerlo, se convocaría una nueva huelga de 72 horas que tendría lugar el próximo mes de noviembre.
