Bryan Kohberger, el presunto asesino de los cuatro jóvenes de Idaho, podría enfrentarse a la pena de muerte. La Fiscalía del condado de Latah presentó este lunes documentos judiciales en los que se detallaba que el suceso, que tuvo lugar el 13 de noviembre de 2022, presentaba "circunstancias agravantes" y que los asesinatos habían sido "especialmente atroces". Esto, aseguraron, demostraba el "total desprecio por la vida humana" que exhibía el sospechoso, de 28 años.
Por eso recomiendan la máxima pena a la que puede enfrentarse un preso: "En consecuencia, considerando todas las pruebas actualmente conocidas por el Estado, el Estado se ve obligado a presentar este aviso de intención de buscar la pena de muerte".
El presunto autor de los asesinatos fue condenado en mayo. En ese momento, se le preguntó cómo se declaraba y aseguro ser inocente. No obstante, el juez no dio sus argumentos por validos y le procesó por cuatro cargos de asesinato en primer grado y otro de robo.
Tras esto, la familia de las víctimas pidieron la pena de muerte. Tras conocer la decisión de la Fiscalía del condado de Latah, Steve Goncalves, padre de uno de los jóvenes asesinados aseguró sentir un "gran alivio":
Esto no es algo sobre lo que vamos a tener una fiesta. No es algo que realmente querríamos esperar o ser parte de. Pero como padre, si vienes tras mi hijo, voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para asegurarme de que vayamos por ti.
