Fetterman propone a Mitt Romney como presidente de Harvard para terminar con la "ortodoxia de extrema izquierda"

El candidato a presidente no renovará su puesto en noviembre y bien podría seguir los pasos de su excolega Ben Sasse, quien también abandonó el Senado para presidir una universidad.

Desde que estallara el conflicto entre Hamás e Israel el 7 de octubre del 2022, el senador John Fetterman rompió con muchos de sus colegas progresistas en el Congreso al expresarse en defensa del Estado judío en múltiples ocasiones, incluso señalando a viva voz el antisemitismo en los campus universitarios. En efecto, con la intención de combatir este último punto, propuso a un colega republicano como presidente de la Universidad de Harvard.

El senador por Pennsylvania, electo en 2022 tras derrotar a Mehmet Oz, rechazó recientemente la etiqueta de "progresista" y aseguró que quería estar del lado "correcto" en defensa de Israel.

En esta oportunidad, respaldó oficialmente a Mitt Romney (R-UT) para ser el próximo presidente de Harvard, cargo que se encuentra atravesando un interinato tras la mediática renuncia de Claudine Gay.

Analizando los últimos acontecimientos en la Universidad de Columbia, donde más de cien personas fueron detenidas en una manifestación antisemita, Fetterman aseguró que su colega republicano podría ayudar a corregir esta tendencia en los campus universitarios.

"Como antiguo alumno de Harvard, y después de esta temporada loca de antisemitismo en Columbia, lo suscribo. Este ex gobernador de Massachusetts no necesita un sueldo, pero Harvard y sus pares académicos necesitan recalibrarse de la ortodoxia de extrema izquierda", escribió en su cuenta de X, reaccionando a un artículo de opinión del exalumno Daniel Rosen en The Wall Street Journal.

"Como nieto de supervivientes del Holocausto y presidente del Congreso Judío Americano, me parece devastador que Harvard no haya abordado enérgicamente el antisemitismo incontrolado en el campus. Cualquiera que haya estudiado allí puede dar fe de que Harvard no es una institución antisemita. Ni por un momento me sentí oprimido o marginado como estudiante en el campus de Harvard. Pero, para mi consternación, en los últimos años se ha producido un aumento desmesurado -y lo que es peor, una tolerancia administrativa- del discurso de odio contra los judíos, incluso contra estudiantes judíos. La respuesta de la universidad ha sido hasta ahora destartalada e improductiva, por decirlo suavemente", escribió Rosen.

En cuanto a Romney, lo describió como una persona con un "carácter único para tender puentes", "precisamente lo que Harvard necesita en una era de polarización tóxica". A su vez, lo destacó como un "administrador elocuente y experimentado que ha demostrado consistentemente su independencia política en defensa de lo que es correcto, más que de lo que es conveniente".

"Aunque muchos en Harvard no compartan la política de Romney -una encuesta del Harvard Crimson de 2022 muestra que más del 80 % del profesorado de Harvard se identifica como liberal-, elegirlo sería una forma ideal de alimentar una cultura y una atmósfera de investigación abierta y diálogo respetuoso. Lo que importa más que las inclinaciones políticas, es que Romney tenga el valor moral y la independencia para identificar las raíces del antisemitismo en la universidad, abordar el descenso de solicitudes y matriculaciones de estudiantes judíos y enseñar a una nueva generación de jóvenes adultos la importancia de la tolerancia mutua y la coexistencia civilizada", sumó Rosen.

Romney, además exnominado republicano a presidente en 2012, adelantó que no intentaría buscar un segundo mandato en el Senado, por lo que dejaría Washington DC a comienzos del 2025. En caso de estar interesado en la propuesta, seguiría los recientes casos del exsenador Ben Sasse y el excongresista Bill Johnson, quienes actualmente ejercen como presidentes de la Universidad de Florida y de la Universidad Estatal de Youngstown, respectivamente.