Este lunes, Estados Unidos y Reino Unido, junto con el apoyo de Australia, Bahréin, Canadá y Países Bajos, lanzaron varias rondas de ataques a gran escala contra diversos objetivos hutíes en Yemen.
Los ataques, según el comunicado en conjunto, se realizaron como represalia a las constantes agresiones de los hutíes contra las embarcaciones comerciales en el Mar Rojo y el Golfo de Edén, reportó en exclusiva la revista Politico.
🚨 #ULTIMAHORA | El Departamento de EEUU confirma una segunda oleada de ataques contra objetivos hutíes en Yemen. pic.twitter.com/TpbNEthxtP
— VOZ (@VozMediaUSA) January 22, 2024
Los países afirmaron que fueron ataques de precisión con “la intención de alterar y degradar las capacidades que los hutíes utilizan para amenazar el comercio mundial y las vidas de marineros inocentes”.
“Nuestro objetivo sigue siendo reducir las tensiones y restaurar la estabilidad en el Mar Rojo”, se lee en la declaración conjunta, “pero reiteremos nuestra advertencia a los líderes hutíes: no dudaremos en defender vidas y el libre flujo del comercio en una de las vías fluviales más críticas del mundo frente a continuas amenazas”.
Los bombardeos de este lunes azotaron objetivos en un sitio de almacenamiento subterráneo de los hutíes y también otros objetivos conectados a las capacidades de vigilancia aérea y de misiles del grupo rebelde apoyado por Irán.
Los ataques, según el diario The New York Times, llegan en un momento donde la Administración Biden está preocupada por la posible respuesta de Irán ante el aumento de las represalias occidentales.
Se trata, de hecho, de la segunda ronda de ataques a gran escala realizada por los seis países de forma conjunta. Sin embargo, Estados Unidos ha lanzado decenas de ataques individuales a menor escala contra objetivos hutíes que, según el Pentágono, representaban amenazas inminentes contra las embarcaciones comerciales.
El primer ataque a gran escala se lanzó el 11 de enero, después de que los hutíes ignoraran las múltiples advertencias de Washington y sus aliados para que detuvieran los ataques contra el comercio marítimo.
