Una de las instituciones más prestigiosas y laureadas del fútbol mundial está siendo investigada por un caso que puede ser una de las mayores corruptelas de la historia del deporte. Las autoridades judiciales españolas tienen altas evidencias de que el FC Barcelona, bajo el mandato de los expresidentes Sandro Rosell y Josep María Bartomeu, pudo incurrir en varios delitos relacionados con el soborno a los árbitros. Un caso denominado caso Negreira.
Según informa el periódico español El Mundo, el juzgado instructor del caso Negreira ha emitido varios autos en los que refleja los 7,3 millones de euros -unos 7,8 millones de dólares- que pagó el equipo español a José María Enríquez Negreira -apellido que se ha usado para denominar este caso-, ex árbitro y antiguo vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA). Este es el órgano afiliado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que se encarga del funcionamiento y organización de los árbitros.
Lo que no se ha esclarecido por el momento es si esos pagos fueron para que el FC Barcelona recibiese beneficios arbitrales en los partidos. Aun así, la Justicia ya estudia imputar a la institución por el hecho de haber pagado dicha cantidad a Enríquez Negreira y ha pedido a las autoridades policiales que lo investigue.
Los pagos que realizó el FC Barcelona fueron a empresas propiedad o asociadas a Enríquez Negreira y a su hijo Javier, quien también está siendo investigado.
Piden entre siete y diez años de cárcel para cada uno de los acusados
En total, son seis las personas para las que se les está pidiendo penas de cárcel. Además de Enríquez Negreira, su hijo Javier, Rosell y Bartomeu, dos ex altos directivos del FC Barcelona, Óscar Grau y Albert Soler, también están siendo investigados. Para cada uno de ellos, la Fiscalía española pide entre siete (en el caso de Enríquez Negreira, su hijo y Rossell) y diez años de cárcel (para Bartomeu, Grau y Soler) por haber cometido presuntamente delitos como falsedad documental, corrupción entre particulares y administración desleal.
Por otra parte, el FC Barcelona, como persona jurídica y no física, podría enfrentarse a unas multas tan graves como la disolución de la sociedad.
Los expresidentes Joan Gaspart y Joan Laporta -actualmente cumpliendo su segundo mandato al frente del FC Barcelona tras regresar a la presidencia en 2021- también estarían involucrados, aunque en su caso no podrían ser imputados, ya que, de haber cometido delitos, habrían prescrito ya.
El último caso de corrupción que puede salpicar al FC Barcelona
En las dos últimas décadas, los casos de corrupción han mancillado al FC Barcelona. Al ser una institución de gran reputación -y no sólo en lo deportivo-, estos escándalos no han hecho más que desprestigiarla.
Varios jugadores que pasaron por el equipo -como Lionel Messi, Gerard Piqué o Javier Mascherano- fueron condenados por defraudar a la Hacienda española y tuvieron que pagar multas económicas que superaron el millón de dólares.
Otro fue el fichaje de Neymar. El por aquel entonces presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, y su vicepresidente, Josep María Bartomeu, fueron acusados junto con el futbolista y sus padres de estafar a la empresa que poseía el 40% de los derechos futbolísticos de Neymar. Este caso provocó la dimisión de Rosell como presidente. Finalmente, y tras años de proceso judicial, todos los acusados salieron absueltos.
Además del caso Negreira, hay otro caso inmerso en su proceso judicial: el Barçagate. En febrero de 2020, la emisora de radio española Cadena Ser destapó que, durante su mandato, Bartomeu y su ejecutiva lanzaron campañas de desprestigio contra algunos jugadores y otras personas relacionadas con la institución que no eran afines a la directiva. Ocho meses después, Bartomeu dimitió y continúa siendo investigado junto a otros miembros de su directiva.
