El estadounidense Robert Prevost es el nuevo papa
Tras dos días, los cardenales reunidos en la Capilla Sixtina eligieron al estadounidense de raíz hispana Robert Prevost como sumo pontífice. Así le contamos la expectación en la plaza, la celebración cuando apareció el humo blanco y el discurso del flamante pontífice.

El papa León XIV
Nacido en Chicago y con herencia hispana del lado materno, Robert Prevost logró este jueves, en la cuarta votación, los 89 votos requeridos para ser el nuevo papa. Es el segundo papa del continente americano, el primero de Estados Unidos.
Así le contamos, segundo a segundo, cómo fue la previa de la elección de León XIV y sus primeras palabras.
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El discurso completo de León XIV
"¡La paz esté con ustedes! Queridísimos hermanos y hermanas, éste fue el primer saludo de Cristo resucitado, el buen pastor que dio su vida por el rebaño de Dios. También yo quisiera que este saludo de paz entrara en sus corazones, llegara a sus familias y a todas las personas, dondequiera que estén; y a todos los pueblos, y a toda la tierra: la paz esté con ustedes.
Esta es la paz de Cristo resucitado, una paz conciliadora y humilde y preservadora. Viene de Dios. Dios, que nos ama a todos, sin límites ni condiciones. Tengamos en nuestros oídos la voz débil, pero siempre valiente, del Papa Francisco, que bendijo Roma... el Papa que bendijo Roma y el mundo aquel día de la mañana de Pascua.
Permítanme continuar esa misma bendición. Dios nos ama, a todos, el mal no prevalecerá. Todos estamos en las manos de Dios. Sin miedo, unidos, de la mano de Dios y entre nosotros, seguiremos adelante. Somos discípulos de Cristo, Cristo va delante de nosotros, y el mundo necesita su luz. La humanidad le necesita como un puente para llegar a Dios y a su amor. Tú nos ayudas a construir puentes con el diálogo y el encuentro para que todos seamos un solo pueblo siempre en paz.
¡Gracias, Papa Francisco!
Gracias a mis hermanos cardenales que me eligieron para ser el sucesor de Pedro y caminar junto a ustedes como Iglesia unida buscando todos juntos la paz y la justicia, trabajando juntos mujeres y hombres, fieles a Jesucristo sin miedo, anunciando a Cristo, para ser misioneros, fieles al evangelio.
Soy agustino, hijo de San Agustín. Él dijo: "Para ustedes soy obispo, con ustedes soy cristiano". Así que caminemos todos juntos hacia esa patria que Dios nos tiene preparada.
A la Iglesia de Roma, un saludo especial:
Tenemos que buscar juntos cómo ser una Iglesia misionera, que tiende puentes, dialoga, siempre dispuesta a recibir con los brazos abiertos a todos, como esta plaza, abierta a todos, a todos los que necesitan de nuestra caridad, de nuestra presencia, del diálogo, del amor.
Si me permiten también, una palabra, un saludo a todos aquellos... y en modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú. Donde un pueblo fiel ha acompañado a su Obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo.
A todos ustedes, hermanos y hermanas de Roma, de Italia, de todo el mundo, queremos ser una Iglesia sinodal, caminando y buscando siempre la paz, la caridad, la cercanía, especialmente con los que sufren.
Hoy es el día de la Súplica a Nuestra Señora de Pompeya.
Nuestra bendita madre María siempre quiere caminar con nosotros, estar cerca de nosotros, siempre quiere ayudarnos con su intercesión y su amor. Por eso, recemos juntos por esta misión, por toda la Iglesia y por la paz en el mundo.
Pedimos esta gracia especial a María, nuestra Madre.
[Comienza oración]".
Las primeras palabras del flamante papa
"¡La paz esté con ustedes!", dijo el flamante papa antes de recordar a su antecesor, el papa Francisco.
León XIV luego pronunció un discurso en español, que despertó aplausos de la plaza. Envió un saludo "a todos", sobre todo a su diócesis en Perú, Chiclayo, "donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo".
Pasando al italiano, dijo a todos los fieles del mundo que debían ser una Iglesia caritativa y peregrina, que cuida a "quienes sufren".
¿Quién es Robert Prevost?
El estadounidense Robert Prevost, bajo el nombre León XIV, es el nuevo papa. De 69 años, nació en Chicago y tiene padres de origen francés y español. Pasó unas cuatro décadas en Perú, donde fue obispo.
Como reportó ayer VOZ, Prevost se coló en la terna de los purpurados que entraron al Cónclave como favoritos. Sus compañeros le describen como un hombre "sereno y templado, de hablar pausado, mirada afable y convicciones firmes. Uno de esos líderes que prefieren construir desde dentro antes que buscar los focos".
En la década de los 80, Prevost fue enviado como misionero agustino a la diócesis de Chulucanas, donde vivió más de 10 años, rodeado de pobreza. Tras ser superior general de los agustinos durante dos mandatos (2001–2013), regresó a Perú como obispo de Chiclayo. Allí mantuvo ese mismo estilo: pastor sencillo, cercano, con oído fino para detectar líderes locales y formar nuevas vocaciones.
En lo doctrinal se le sitúa al lado de los reformistas siguiendo el legado de Francisco. Sin embargo, al contrario que el argentino huye de los focos y apenas ha concedido entrevistas ni participado en debates públicos.
Ha tenido una carrera fulgurante durante los últimos años del último papa, que lo llevó a Roma para ponerle al frente del Dicasterio de los Obispos, encargado del nombramiento de nuevos prelados por todo el mundo. Además, le hizo miembro del dicasterio para la Doctrina de la fe.
El estadounidense Robert Prevost es el nuevo papa
Elegido el nuevo papa, ¿qué sucederá ahora?
Tras el humo blanco que anuncia la elección de un nuevo papa, el flamante sumo pontífice se dirige a la llamada Sala de las Lágrimas, ubicada al fondo de la Capilla Sixtina, donde podrá orar y llorar por las responsabilidades que pesan ahora sobre sus hombros.
Tras vestir su primera sotana blanca, característica de los papas, los cardenales le prometen obediencia. Vale destacar que el seleccionado debe aceptar el cargo, por lo que el proceso se alarga un poco más.
Luego se dará a conocer. El prelado Dominique Mamberti pronunciará luego el famoso Habemus papam ("tenemos un papa"), revelando el nombre escogido por el elegido para su papado. Aquel nuevo nombre puede revelar claves de cómo será su mandato (Jorge Bergoglio, por ejemplo, eligió el de Francisco en referencia a un santo avocado a los pobres).
Luego el nuevo pontífice impartirá una bendición. Durante los próximos días se celebrará una misa ante líderes religiosos y políticos, como una suerte de investidura. También recorrerá la plaza en el papamóvil, exponiendo una homilía en la que se espera determine sus prioridades.
La plaza de San Pedro y el mundo esperan la salida del nuevo papa
Humo blanco, suenan las campanas de la basílica de San Pedro: el Cónclave eligió al próximo papa. Miles de fieles apostados en la plaza rompieron en aplausos y vítores, mientras cada vez más personas se acercan a la plaza para conocer quién será el próximo sumo pontífice.
El mundo mira ahora el balcón donde aparecerá el 267º pontífice.
¡FUMATA BLANCA, HAY NUEVO PAPA!
¿La cuarta será la vencida?
Tras la pausa para el almuerzo, los 133 cardenales volvieron a congregarse en la Capilla Sixtina. Si hay acuerdo en la primera votación, el próximo papa podría conocerse en cerca de una hora. Si no, se producirá una segunda votación que podría demorar el resultado más de dos horas y media.
Si ambas fumatas son negras, la vigilancia del humo se retomará mañana.
Fumata Negra: no hay nuevo papa después de tres votaciones
No hay papa aún tras tres votaciones. La fumata negra de la chimenea de la Capilla Sixtina certificó poco antes de las 12 del mediodía que los 133 cardenales del Cónclave aún no se han puesto de acuerdo en quién es la persona adecuada para sustituir a Francisco.
Larga noche de conversaciones en Santa Marta
La noche no trajo precisamente reposo a los cardenales que participan en el Cónclave. La cena y los pasillos de la residencia de Santa Marta se convirtieron en testigo de conversaciones entre grupos de purpurados hablando sobre los papables en busca de apoyos para los distintos favoritos o estudiando nuevas vías si las votaciones continúan atascadas.
José Beltrán, director y enviado especial de la revista especializada Vida Nueva a Roma, apunta la importancia de estos corrillos en la elección de los pontífices: "Como ya sucediera en otros cónclaves anteriores, son precisamente las conversaciones durante y posteriores a la cena las que llevarían a los llamados ‘grandes electores’ a sugerir el apoyo a uno u otro papable. [...] Los diálogos informales, que no secretos, lo mismo en el comedor del que hasta hace unas semanas fue el hogar del papa Francisco que en las salas polivalentes de planta baja, en los pasillos o en las escaleras. Es en estos espacios donde se pueden consolidar unas candidaturas y descastarse otras".
El Espíritu Santo y la gaviota
Una gaviota se convirtió en la simpática protagonista de la tarde a la espera de que saliera el humo de la chimenea de la Capilla Sixtina. El ave se posó en varias ocasiones en el tejado del edificio, junto al mecanismo encargado de decir al mundo si los cardenales llegaban o no a un acuerdo. Las miles de personas que abarrotaban la Plaza de San Pedro comenzaron a aplaudir y jalear al animal cada vez que volvía a posarse y saltaba entre las vetustas tejas.
Además, la situación de la gaviota, en pleno tiro de las cámaras del Vaticano que enviaban la señal en directo a los medios de todo el mundo, hicieron que las redes sociales se llenaran de memes sobre el ave. También se convirtió en protagonista de numerosas noticias.
Algunos usuarios bromearon con que el ave vino a sustituir al Espíritu Santo (representado por la tradición cristiana como una paloma), que debió "ausentarse" del Vaticano al no ser elegido ningún nuevo papa. Otros, sin embargo, apuntaban que los cambios de Francisco son tan grandes que ha cambiado hasta el ave que simboliza a la tercera persona de la Trinidad.

La gaviota que amenizó la espera en la Plaza de San Pedro
Los cardenales vuelven a la Capilla Sixtina
Los 133 cardenales electores regresaron a la Capilla Sixtina donde volverán a tratar de elegir al sustituto del papa Francisco. Tras el tanteo inicial, Parolin ha visto debilitarse su posición de gran favorito tras caer en una pinza entre el sector reformista, que le acusa de traicionar el legado de Francisco y pactar con los conservadores, mientras que éstos siguen responsabilizándole del acuerdo con el Gobierno Comunista de China y de varios de los "errores" de Bergoglio.
Los otros papables tampoco consiguieron los votos requeridos para ser nombrados pontífice y comenzaron a surgir nombres de una segunda línea de tapados que podrían tomar fuerza en el caso de que a lo largo de la jornada del jueves ninguno de los favoritos consiga el respaldo suficiente para ocupar la silla de San Pedro.