Decenas de hospitales infantiles continúan ofreciendo cirugías de cambio de sexo y bloqueadores de pubertad a pesar de la orden de prohibición de Trump

Más de tres docenas de hospitales infantiles siguen ofreciendo cirugías y fármacos relacionados a las operaciones de cambio de sexo a pesar de la orden ejecutiva del presidente Donald Trump que bloquea los fondos federales a las instituciones que ofrecen este tipo de servicios.

De acuerdo con una investigación del Daily Caller, decenas de hospitales confirmaron que siguen ofreciendo bloqueadores de pubertad e incluso “atención de afirmación de género” para menores de edad, ignorando la orden ejecutiva de Trump.

Los tratamientos de “afirmación de género” son, en realidad, un eufemismo utilizado por los activistas transgénero para referirse a las cirugías de cambios de género en menores.

Por ejemplo, una recepcionista del Boston Medical Center mencionó la orden ejecutiva de Trump y dijo al Daily Caller: “Por lo que he oído, nada ha cambiado en lo que nuestros médicos ofrecen”.

Otros representantes de decenas de hospitales del país mencionaron explicaciones similares, afirmando que no han dejado de ofrecer servicios relacionados a las operaciones de cambio de sexo, incluso citando las batallas legales en torno a la orden ejecutiva como excusa.

Lista de los hospitales

A continuación, la extensa lista de hospitales que siguen ofreciendo servicios relacionados a las operaciones de cambio de sexo, según el Daily Caller:

Batalla legal contra la orden de Trump

El descubrimiento se produce casi siete semanas después de que el presidente Trump firmara una orden ejecutiva donde ordenó a los hospitales infantiles que dejen de proporcionar fármacos o servicios relacionados a las operaciones de cambio de sexo en menores o, de lo contrario, sufrirán el bloqueo de fondos federales.

“El titular de cada departamento o agencia ejecutiva que proporcione subvenciones de investigación o educación a instituciones médicas, incluidas escuelas de medicina y hospitales, deberá, de conformidad con la ley aplicable y en coordinación con el Director de la Oficina de Gestión y Presupuesto, tomar medidas apropiadas de inmediato para garantizar que las instituciones que reciben subvenciones federales de investigación o educación pongan fin a la mutilación química y quirúrgica de niños”, se lee en la orden firmada el 28 de enero pasado.

La orden del presidente ha enfrentado disputas legales, lo cual ha envalentonado a los hospitales que mantienen los servicios. Por ejemplo, el Children’s Hospital Colorado se adhirió a una demanda de Washington y citó las batallas legales contra la Administración Trump como el principal motivo para seguir ofreciendo a pacientes menores de edad bloqueadores de la pubertad o la terapia hormonal.

La Administración Trump fue demandada por los estados de Washington, Oregón, Minnesota y Colorado, que lograron una medida cautelar preliminar de un juez federal en Seattle el 28 de febrero, un mes después de la firma de la orden ejecutiva.

Asimismo, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) presentó una demanda distinta y logró otra medida cautelar de un juez federal en Baltimore, que ordenó al Gobierno federal a seguir financiando a los hospitales que realicen este tipo de operaciones o faciliten fármacos para las operaciones de cambio de sexo mientras el caso se desarrolla y llega a una conclusión.