Cáncer, trastornos mentales, e incluso la muerte: salen a la luz los riesgos de los tratamientos transgénero
Se trata de las conversaciones internas filtradas de los miembros de la Asociación Profesional Mundial para la Salud del Transgénero en las que reconocen los problemas derivados de los procedimientos.
Las denominadas transiciones de sexo tienen graves consecuencias en la salud de las personas que se someten a los tratamientos. Así lo mostró un trabajo periodístico que reveló conversaciones internas filtradas de los miembros de la Asociación Profesional Mundial para la Salud del Transgénero (WPATH) que participaron en diferentes chats y paneles. En las conversaciones, los médicos reconocen los problemas de salud que enfrentan los pacientes luego de hacerse alguna cirugía para el cambio de sexo o recibir los tratamientos de hormonas.
El informe de las conversaciones fue realizado por Mia Hughes y la investigación fue impulsada por el periodista Michael Shellenberger, conocido por revelar también los detalles de casos como el de los Twitter Files. El primero en recibir las conversaciones fue Shellenberger y Hughes se encargó de investigar el caso y realizar el reportaje. Hughes creó un informe extenso para la organización que fundó con Shellenberger, Environmental Progress (una organización no gubernamental).
La investigación titulada Los Archivos WPATH: experimentos quirúrgicos y hormonales pseudocientíficos en niños, adolescentes y personas vulnerables fue publicada esta semana e incluye capturas de pantalla de publicaciones del chat de mensajería interna de WPATH que datan de 2021 a 2024 y varios videos de un panel de discusión interno.
"Discuten sobre cómo improvisar"
WPATH es considerada la principal referencia científica y médica mundial en cuanto a temas de "género". En las últimas décadas, ha dado forma a las orientaciones, políticas y prácticas de gobiernos, asociaciones médicas, sistemas de salud pública y clínicas privada. En ese sentido, el reportaje explicó que "los archivos WPATH revelan que la organización no cumple con los estándares de la medicina basada en evidencia".
Detalló que "los miembros con frecuencia discuten sobre cómo improvisar tratamientos a medida que avanzan. Los miembros son plenamente conscientes de que los niños y adolescentes no pueden comprender las consecuencias de por vida de la 'atención que afirma el género' y, en algunos casos, debido a la falta de conocimientos sobre salud, sus padres tampoco".
Además, Shellenberger publicó, en X, varios videos de las conversaciones. Por ejemplo, hay uno en el que, según Shellenberger, el endocrinólogo Dan Metzger reconoce que muchas veces explican los términos médicos a niños que ni siquiera han estudiado biología.
Asimismo, en otra parte de la conversación, el doctor Metzger indicó que muchos de sus pacientes se arrepienten de haber sido esterilizados. "Sigo a muchos chicos de veintitantos años y siempre digo: 'Oh, el perro no lo hace por ti, ¿verdad?' Dicen: 'No, acabo de encontrar esta maravillosa pareja y ahora queremos tener hijos'. Así que ya sabes, no me sorprende", explicó Metzger.
En otro video, una presunta terapeuta reconoce que trata de hacer lo posible para los niños entiendan sobre el procedimiento al que serán sometidos. Sin embargo, resaltó que "lo que realmente me molesta es que los padres no puedan decirme lo que necesitan saber sobre una intervención médica que aparentemente aprobaron".
Los trastornos mentales
Dentro de las capturas publicadas por Shellenberger, se ven comentarios en los que se habla sobre los trastornos mentales que padecen algunos pacientes. Además, contó el caso de personas que supuestamente murieron meses después de estar bajo tratamiento. "Después de ocho a diez años [de testosterona], desarrollaron hepatocarcinomas... murieron un par de meses después", escribió Shellenberger.
Shellenberger también habló sobre el caso de un cirujano de San Francisco llamado Thomas Satterwhite, quien publicó un mensaje urgente en el chat de mensajes interno de WPATH en el que aseguró que tuvo un paciente que se volvió peligroso y que tenía trastornos del estado de ánimo no diagnosticados que no afloraron hasta el postoperatorio.
En ese sentido, Environmental Progress indicó que los archivos muestran que a los pacientes con problemas graves de salud mental, como esquizofrenia y trastorno de identidad disociativo, se les permite dar su consentimiento para intervenciones hormonales y quirúrgicas. Es la misma situación de personas que se encuentran vulnerables por la falta de viviendas. De igual manera, denuncia el informe, los miembros descartan las preocupaciones sobre estos pacientes y califican los esfuerzos para protegerlos como un control innecesario.
"Los archivos proporcionan evidencia clara de que los médicos y terapeutas son conscientes de que están ofreciendo a menores tratamientos que cambian la vida y que no pueden comprenderse completamente. Los miembros de WPATH saben que los bloqueadores de la pubertad, las hormonas y las cirugías causarán infertilidad y otras complicaciones, incluido el cáncer y la disfunción del suelo pélvico. Sin embargo, se plantean intervenciones médicas que alteran la vida de pacientes jóvenes, incluida la vaginoplastia para un niño de 14 años y hormonas para un niño de 13 años con retraso en el desarrollo", detalló el reportaje.
Environmental Progress señaló que escribió a todos los miembros de WPATH nombrados en los archivos para confirmar sus comentarios y ofrecerles el derecho de respuesta. "Dos personas respondieron: una confirmó que los comentarios que se les atribuían eran correctos y otra no negó sus comentarios, pero refutó la interpretación que Environmental Progress hacía de ellos", explicó la organización no gubernamental.