Hamtramck (Michigan): el fallido experimento progresista que enfrenta al alcalde musulmán con la comunidad LGBT

En Hamtramck, una pequeña ciudad en Michigan, la elección del alcalde demócrata musulmán Amer Ghalib fue interpretada como un triunfo de las políticas progresistas. Sin embargo, en los últimos meses, las decisiones del regidor lo han enfrentado con numerosos miembros de la comunidad que lo acusan de querer acabar con la "diversidad" en la ciudad.

Las criticas a Ghalib comenzaron en junio cuando el concejo municipal aprobó prohibir la exhibición de cualquier bandera diferente a la de Estados Unidos. La decisión generó la reacción de miembros de organizaciones LGBT por considerar que se trata de un intento por evitar el uso de la bandera del orgullo LGBT. Desde ese momento, comenzó un movimiento para intentar obligar al alcalde demócrata a cambiar de opinión.

Pero Ghalib es firme en su decisión. De hecho, en el Labor Day volvió a ser noticia al negarse a desfilar con una organización denominada Hamtramck Queer Alliance. La negativa de Ghalib fue respaldada por la mayoría del Concejo Municipal. En un comunicado, publicador por The Washington Post, el alcalde sostuvo que su decisión de no desfilar se dio porque, a su juicio, la intención era "destruir" su imagen.

"Básicamente, querían destruir nuestra imagen frente a nuestros seguidores haciéndonos parecer como si estuviéramos liderando el grupo queer con todas esas banderas ondeando detrás de nosotros", dijo Ghalib.

"La diversidad se está poniendo a prueba"

Medios de comunicación como The Washington Post han publicado reportajes en los que cuentan cómo la posición del alcalde ha molestado a las organizaciones LGBT. Además, lo han acusado de traicionar la diversidad de la ciudad. "La diversidad étnica, cultural y religiosa que hizo de Hamtramck una especie de modelo se está poniendo duramente a prueba", reseñó The Washington Post, que resaltó que se esperaba que con la elección de Ghalib se impulsaran políticas progresistas debido a que es inmigrante.

"Muchos residentes de este pequeño enclave justo al norte del centro de Detroit vieron estos cambios como una señal del progresismo de Hamtramck. La comunidad musulmana que anteriormente había sufrido discriminación, incluida la intimidación de los votantes y la resistencia al llamado público a la oración en las mezquitas, finalmente había tomado asiento a la mesa", aseguró el medio de comunicación.

Hamtramck no es la primera ciudad en tomar una decisión similar. La semana pasada, dos distritos escolares de California aprobaron una política para limitar qué banderas se pueden ondear en la propiedad escolar. Principalmente, la propuesta establece que no se deben exhibir otras banderas que no sean las autorizadas por las escuelas, como la del orgullo LGBT. La medida se tomó en los distritos de la ciudad de Temecula, en el sur de California, y la pequeña ciudad de Sunol, en el Área de la Bahía.